sábado, 7 de septiembre de 2024

CRISTO ANDANDO SOBRE LAS AGUAS. DOMINGO XVI DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

 


CRISTO ANDANDO SOBRE LAS AGUAS.

DOMINGO XVI DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

MEDITACIONES

PARA EL TIEMPO  DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

DE LA OBRA “VIDA Y DOCTRINA DE JESUCRISTO

SACADA DE LOS CUATRO EVANGELISTAS

Y DISTRIBUIDA EN MATERIA DE MEDITACIÓN

PARA TODOS LOS DÍAS” DEL P. NICOLÁS AVANCINI

 

ORACIÓN PARA COMENZAR

TODOS LOS DÍAS:

 

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Poniéndonos en la presencia de Dios, adoremos su majestad infinita, y digamos con humildad:

  

 “Omnipotente Dios y Señor y Padre mío amorosísimo, yo creo que por razón de tu inmensidad estás aquí presente en todo lugar, que estás aquí, dentro de mí, en medio de mi corazón, viendo los más ocultos pensamientos y afectos de mi alma, sin poder esconderme de tus divinos ojos.

    Te adoro con la más profunda humildad y reverencia, desde el abismo de mi miseria y de mi nada, y os pido perdón de todos mis pecados que detesto con toda mi alma, y os pido gracias para hacer con provecho esta meditación que ofrezco a vuestra mayor gloria… ¡Oh Padre eterno! Por Jesús, por María, por José y todos los santos enseñadme a orar para conocerme y conoceros, para amaros siempre y haceros siempre amar. Amén.”

 

Se meditan los tres puntos dispuestos para cada día.

 

DOMINGO XVI DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

CRISTO ANDANDO SOBRE LAS AGUAS.

 

1.- La navecilla era combatida sobre las olas en medio del mar, etc. Mas en la cuarta vigilia de la noche, vino a ellos andando sobre las aguas (1). Trabajaron toda la noche, porque era el viento contrario. Viólo el Señor desde el monte, y bajó a socorrerlos: Enseñándonos, dice el Crisóstomo (2), a no desear ser luego libres de los trabajos que nos vienen, y para los que Él disponga a los suyos; sino esperar el tiempo y la hora que Él tiene determinados, y entre tanto resistir a la tempestad generosamente. Lo mismo te enseña a ti Jesús en toda tempestad de tus adversidades y pasiones. ¿Qué haces entre los vientos que levantan tempestades, en que peligra tu salvación? ¿Cómo peleas? ¿No dejas el remo, sin forcejar con él? ¿No te das al arbitrio de tus afectos?

2.- Y viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo ser una fantasma (3). Tienen por ilusión la real presencia de Cristo, porque anda sobre las olas; ¡Qué de veces te parece a ti fantasma la inspiración de Dios, qué viene sobre el mar de tus afectos, y te dicta que has de pisar el mar del mundo con generoso desprecio! Y así porque la tienes por ilusión. Permite tú ser antes arrebatado por las tempestades del mundo. Mira como debes corregir tu imaginación en muchas cosas. Lo que ciertamente te hace las cosas tan difíciles, no son ellas tanto cuanto tu imaginación.

3.- Y luego les hablo Jesús diciendo: Confiad; Yo soy: no queráis temer (4). En este riesgo los había puesto el Señor; porque, como dice san Marcos (5): Los obligo de .embarcarse, estando con seguridad en tierra. Por eso también les da el socorro. En cuales quiera dificultades en que te ponga la obediencia, * la caridad, el gusto de tus mayores, ten confianza. Dios es quien te puso en ellas por medio del superior a quien Él rige, * por medio de los preceptos que te dicen su voluntad. No temas; no te desamparará. Haz tú lo que ti te toca.

 

(1) Matth., 14. (2) Hom., 51 in Matth. (3) Matth., 14. (4) Ibid. (5) Marc., 6.

 

ORACIÓN PARA FINALIZAR

TODOS LOS DÍAS:

Os doy gracias, Dios mío, por los buenos pensamientos, afectos y propósitos que me habéis inspirado en este rato de oración…

Todo os lo ofrezco a vuestra mayor honra y gloria… y os pido gracia eficaz para ponerlos por obra…

¡Oh Padre Eterno! Por Jesús, por María, por José y Teresa de Jesús dadme gracia ahora y siempre para cumplir en todas las cosas vuestra santísima voluntad. Amen."

 

Padrenuestro, Avemaría y Gloria

 

 

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Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.

Inmaculado Corazón de María, sed la salvación mía.

Glorioso Patriarca san José, ruega por nosotros.

Santos Ángeles Custodios, rogad por nosotros.

Todos los santos y santas de Dios, rogad por nosotros.

 

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¡Querido hermano, si te ha gustado esta meditación, compártela con tus familiares y amigos!

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Ave María Purísima, sin pecado concebida.