Mostrando entradas con la etiqueta Virgen del Carmen 2024. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Virgen del Carmen 2024. Mostrar todas las entradas

martes, 30 de julio de 2024

31 de julio. CONVERSIÓN DEL MAQUINISTA. MES DE JULIO EN HONOR A LA VIRGEN DEL CARMEN

 


31 de julio

CONVERSIÓN DEL MAQUINISTA

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

MES DE JULIO EN HONOR

A LA VIRGEN DEL CARMEN

 

Por la señal de la santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Oración inicial

Oh Virgen María, Madre de Dios y Madre también de los pecadores, y especial Protectora de los que visten tu sagrado Escapulario; por lo que su divina Majestad te engrandeció, escogiéndote para verdadera Madre suya, te suplico me alcances de tu querido Hijo el perdón de mis pecados, la enmienda de mi vida, la salvación de mi alma, el remedio de mis necesidades, el consuelo de mis aflicciones y la gracia especial que pido en este ejercicio consagrado a vuestra devoción, si conviene para su mayor honra y gloria, y bien de mi alma: que yo, Señora, para conseguirlo me valgo de vuestra intercesión poderosa, y quisiera tener el espíritu de todos los ángeles, santos y justos a fin de poder alabarte dignamente; y uniendo mis voces con sus afectos, te saludo una y mil veces, diciendo:

3 Avemarías

A continuación se lee el relato tomado de la obra “Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

31 de julio

CONVERSIÓN DEL MAQUINISTA

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

EI sacerdote Don Vicente Vela, Vicario coronel castrense de la Marina, testigo presencial, relata este suceso: Era el año 1943. Con otros buques de la Escuadra Española se hallaba fondeado en El Ferro uno de los destructores tipo "Alsedo". El comandante del destructor supo que el maquinista suboficial del buque se encontraba en el Hospital de Marina en gravísimo estado, y sin pérdida de tiempo, voló al hospital para visitarle y consolarle.

El comandante pregunta a la religiosa sobre el estado espiritual del doliente:

-"A juzgar por la imagen de la Virgen de la Caridad que se cuelga sobre su pecho -responde la Hermana- parece creyente, pero... se negó rotundamente a confesar".

El comandante -creyente a machamartillo y, por añadidura, portador del Santo Escapulario desde su infancia-, llevado de celo cristiano ejemplar, le dio a besar el crucifijo, que el enfermo besó más por acatamiento y respeto a su jefe que por veneración y afecto a Cristo Crucificado.

Le invitó a que se reconciliara con Dios, oponiéndose rotundamente. Le insistió con alientos paternales, pero todo fue inútil.

Desvanecida toda esperanza, y ante la fatigosa respiración del enfermo, el comandante, atribulado, se retiró a orar por él, no sin dejarle puesto un Escapulario del Carmen sobre su pecho.

Minutos después volvió el comandante, temiendo el desenlace fatal, y al largarle el último cabo ante el náufrago que se avecinaba, el maquinista impenitente pidió confesión.

El Santo Escapulario le dio alientos para las postreras palabras; terminada su Confesión, con profundas muestras de sincero arrepentimiento, murió plácidamente, mientras el Padre capellán le encomendaba el alma.

 

Oración final para todos los días

Infinitas gracias os damos, soberana Princesa, por los favores que todos los días recibimos de vuestra benéfica mano; dignaos, Señora, tenernos ahora y siempre bajo vuestra protección y amparo; y para más obligaros, os saludamos con una Salve:

 

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A Ti llamamos los desterrados hijos de Eva, a Ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos, y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡Oh piadosa! ¡Oh dulce Virgen María! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

***

Querido hermano comparte esta devoción con tus familiares y amigos para que muchos conozcan y amen a la Virgen.

***

Nuestra Señora del Carmen, ruega por nosotros.

Ave María Purísima, sin pecado concebida.

lunes, 29 de julio de 2024

30 de julio. REFRENA LA IMPETUOSA CORRIENTE DE UN RÍO. MES DE JULIO EN HONOR A LA VIRGEN DEL CARMEN

 


30 de julio

REFRENA LA IMPETUOSA CORRIENTE DE UN RÍO

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

MES DE JULIO EN HONOR

A LA VIRGEN DEL CARMEN

 

Por la señal de la santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Oración inicial

Oh Virgen María, Madre de Dios y Madre también de los pecadores, y especial Protectora de los que visten tu sagrado Escapulario; por lo que su divina Majestad te engrandeció, escogiéndote para verdadera Madre suya, te suplico me alcances de tu querido Hijo el perdón de mis pecados, la enmienda de mi vida, la salvación de mi alma, el remedio de mis necesidades, el consuelo de mis aflicciones y la gracia especial que pido en este ejercicio consagrado a vuestra devoción, si conviene para su mayor honra y gloria, y bien de mi alma: que yo, Señora, para conseguirlo me valgo de vuestra intercesión poderosa, y quisiera tener el espíritu de todos los ángeles, santos y justos a fin de poder alabarte dignamente; y uniendo mis voces con sus afectos, te saludo una y mil veces, diciendo:

3 Avemarías

A continuación se lee el relato tomado de la obra “Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

30 de julio

REFRENA LA IMPETUOSA CORRIENTE DE UN RÍO

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

Daniel de la Virgen María (+1678), nos refiere que en el lugar llamado Roberto, a tres millas de Trento, el río Lenno creció tantísimo por efecto de las lluvias torrenciales, que venía desbordado y haciendo muchísimos estragos, que era una espantosa ruina para toda la comarca.

Viendo los vecinos ser insuficientes todos los medios naturales para conjurar tamaño peligro y precaverse de aquella inevitable ruina, acudieron al Señor, haciendo constantes rogativas, mas no por eso decrecían las aguas ni cesaba el caudal del río de hacer cada vez más estragos; no acertando con el medio por el cual Dios Nuestro Señor deseaba darles la paz y el consuelo.

Mas he aquí que, acudiendo con reiteradas súplicas a la oración los religiosos del convento carmelita de Roberto, dignóse la Virgen Santísima inspirárselo.

El Prior de dicho convento, P. Jerónimo de Dóminis, tomó el Escapulario, lo bendijo solemnemente en la iglesia en presencia de todo el pueblo y, seguidamente, marchó en pro­ cesión con toda la comunidad a las márgenes del río.

Allí, seguido de una inmensa multitud de fieles, hizo una fervorosa oración a Dios y a su bendita Madre, pidiéndole se dignase manifestar en tan inminente peligro su valiosísima protección, ya que había dicho a su siervo San Simón "ser su bendito Escapulario señal de salud en los peligros", y que por su virtud se sirviera refrenar las corrientes impetuosas de aquel río desbordado.

Dicho esto, con vivísima fe, arrojó al agua el bendito Escapulario. Y, ¡oh prodigio!, apenas tocó el agua el celestial vestido de María, notóse al punto que las enfrenó y las puso a raya, pues todos advirtieron con estupor y asombro que se fueron sensible y paulatinamente recogiendo y estrechando hasta quedar reducidas al cauce normal y natural del río.

 

Oración final para todos los días

Infinitas gracias os damos, soberana Princesa, por los favores que todos los días recibimos de vuestra benéfica mano; dignaos, Señora, tenernos ahora y siempre bajo vuestra protección y amparo; y para más obligaros, os saludamos con una Salve:

 

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A Ti llamamos los desterrados hijos de Eva, a Ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos, y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡Oh piadosa! ¡Oh dulce Virgen María! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

***

Querido hermano comparte esta devoción con tus familiares y amigos para que muchos conozcan y amen a la Virgen.

***

Nuestra Señora del Carmen, ruega por nosotros.

Ave María Purísima, sin pecado concebida.

domingo, 28 de julio de 2024

29 de julio. PRODIGIO EN LA BAHÍA DE CÁDIZ. MES DE JULIO EN HONOR A LA VIRGEN DEL CARMEN

 


29 de julio

PRODIGIO EN LA BAHÍA DE CÁDIZ

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

 

MES DE JULIO EN HONOR

A LA VIRGEN DEL CARMEN

 

Por la señal de la santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Oración inicial

Oh Virgen María, Madre de Dios y Madre también de los pecadores, y especial Protectora de los que visten tu sagrado Escapulario; por lo que su divina Majestad te engrandeció, escogiéndote para verdadera Madre suya, te suplico me alcances de tu querido Hijo el perdón de mis pecados, la enmienda de mi vida, la salvación de mi alma, el remedio de mis necesidades, el consuelo de mis aflicciones y la gracia especial que pido en este ejercicio consagrado a vuestra devoción, si conviene para su mayor honra y gloria, y bien de mi alma: que yo, Señora, para conseguirlo me valgo de vuestra intercesión poderosa, y quisiera tener el espíritu de todos los ángeles, santos y justos a fin de poder alabarte dignamente; y uniendo mis voces con sus afectos, te saludo una y mil veces, diciendo:

3 Avemarías

A continuación se lee el relato tomado de la obra “Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

29 de julio

PRODIGIO EN LA BAHÍA DE CÁDIZ

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

Un joven marinero, natural de Salamanca y domiciliado en la calle de Fontana número seis, fue el agraciado con la protección misericordiosa de la Virgen Santísima del Carmen, manifestada a través de su Santo Escapulario.

En 1948 se impuso el santo Escapulario en el Carmen de Abajo, de Salamanca. El P. Manuel Ibáñez, al imponérselo, le dijo:

-"Sé siempre muy devoto de la Santísima Virgen del Carmen. Ya sabes que es patrona especial de los marineros. Si te pasara algo, procura asirte con todo fervor a esta áncora del Escapulario, e invoca con gran fe a nuestra Madre del Carmen, que Ella te salvará".

Y así fue. A los cinco días ya estaba nuestro marino en aguas de Cádiz y a bordo del "Artabro". La mar estaba revuelta y con fuerte marejada. Era, además, de noche y noche cerrada. El joven marinero tiene la desgracia de caer desde cubierta al agua, en uno de los fuertes vaivenes de la embarcación.

Lucha con denuedo contra el oleaje embravecido. Forcejea por hacerse ver u oír del resto de la dotación. Todo en vano. En medio de su angustioso y mortal peligro, sólo una cosa le infunde confianza en su salvación: el Escapulario que ha pocos días que lleva.

Aclama insistentemente a la Virgen y besa con encendida y esperanzada fe su Escapulario, que de vez en vez lleva el oleaje y el viento hasta sus labios. Lleva diez horas luchando con el mar.

Por fin, tras una lucha más que titánica contra los elementos, logra arribar a tierra, lanzado por una ola gigante, que él diría la impulsaba y dirigía la diestra de la Virgen Santísima para salvarle.

 

Oración final para todos los días

Infinitas gracias os damos, soberana Princesa, por los favores que todos los días recibimos de vuestra benéfica mano; dignaos, Señora, tenernos ahora y siempre bajo vuestra protección y amparo; y para más obligaros, os saludamos con una Salve:

 

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A Ti llamamos los desterrados hijos de Eva, a Ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos, y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡Oh piadosa! ¡Oh dulce Virgen María! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

***

Querido hermano comparte esta devoción con tus familiares y amigos para que muchos conozcan y amen a la Virgen.

***

Nuestra Señora del Carmen, ruega por nosotros.

Ave María Purísima, sin pecado concebida.

sábado, 27 de julio de 2024

28 de julio. LA LUCHA Y LA VICTORIA. MES DE JULIO EN HONOR A LA VIRGEN DEL CARMEN

 


28 de julio

LA LUCHA Y LA VICTORIA

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

MES DE JULIO EN HONOR

A LA VIRGEN DEL CARMEN

 

Por la señal de la santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Oración inicial

Oh Virgen María, Madre de Dios y Madre también de los pecadores, y especial Protectora de los que visten tu sagrado Escapulario; por lo que su divina Majestad te engrandeció, escogiéndote para verdadera Madre suya, te suplico me alcances de tu querido Hijo el perdón de mis pecados, la enmienda de mi vida, la salvación de mi alma, el remedio de mis necesidades, el consuelo de mis aflicciones y la gracia especial que pido en este ejercicio consagrado a vuestra devoción, si conviene para su mayor honra y gloria, y bien de mi alma: que yo, Señora, para conseguirlo me valgo de vuestra intercesión poderosa, y quisiera tener el espíritu de todos los ángeles, santos y justos a fin de poder alabarte dignamente; y uniendo mis voces con sus afectos, te saludo una y mil veces, diciendo:

3 Avemarías

A continuación se lee el relato tomado de la obra “Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

28 de julio

LA LUCHA Y LA VICTORIA

“Prodigios del Escapulario” del P. Rafael María López-Melús.

 

En su larga carrera apostólica el P. Milleriot se halló con un alma terriblemente amargada por los reveses de la vida. Falta de aliento y de valor, esta desgraciada mujer llegó al borde de la desesperación. Viéndola sin aliento ni consuelo, el P. Milleriot le impuso el santo Escapulario; pero ella, como no llegara de pronto el consuelo que esperaba, intentó suicidarse. Súpolo el Padre, y saliéndole al encuentro, le suplicó le prometiera que no se quitaría el santo Escapulario. Y como ella se lo jurara, dijo el Padre, lleno de satisfacción:

-"Ya te he cogido. Podrás intentar matarte; pero no te morirás".

Así fue, porque dos veces se arrojó al Sena y, con no saber nadar, no se hundió ninguna de ellas. Convirtióse después, porque su vida empecatada le traía aquella desesperación, y al fin murió cristianamente.

 

Oración final para todos los días

Infinitas gracias os damos, soberana Princesa, por los favores que todos los días recibimos de vuestra benéfica mano; dignaos, Señora, tenernos ahora y siempre bajo vuestra protección y amparo; y para más obligaros, os saludamos con una Salve:

 

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve. A Ti llamamos los desterrados hijos de Eva, a Ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos, y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clementísima! ¡Oh piadosa! ¡Oh dulce Virgen María! Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

***

Querido hermano comparte esta devoción con tus familiares y amigos para que muchos conozcan y amen a la Virgen.

***

Nuestra Señora del Carmen, ruega por nosotros.

Ave María Purísima, sin pecado concebida.