EL PAGO Y LA RAZÓN DE LAS
SEQUEDADES
He visto claro que no deja Dios sin
gran premio, aun en esta vida; porque es así, cierto, que una hora de las que
el Señor me ha dado de gusto de Sí después acá, me parece quedan pagadas todas
las congojas que en sustentarme en la oración mucho tiempo pasé.
Tengo para mí que quiere el Señor
dar muchas veces al principio, y otras a la postre, estos tormentos y otras
muchas tentaciones que se ofrecen, para probar a sus amadores y saber si podrán
beber el cáliz (26) y ayudarle a llevar la cruz, antes que ponga en ellos
grandes tesoros. Y para bien nuestro creo nos quiere Su Majestad llevar por
aquí, para que entendamos bien lo poco que somos; porque son de tan gran dignidad
las mercedes de después, que quiere por experiencia veamos antes nuestra
miseria primero que nos las dé, por que no nos acaezca lo que a Lucifer (V 11,
11).