miércoles, 24 de agosto de 2022

DÍA 25. EL CORAZÓN DE LA SIEMPRE VIRGEN

DÍA 25.

EL CORAZÓN DE LA SIEMPRE VIRGEN

 

MES DE AGOSTO  EN HONOR

AL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA

 

wOraciones para comenzar todos los días:

+Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Con el Ángel de la Paz que enseñó a los tres pastorcitos de Fátima-Lucía, Francisco y Jacinta- a rezar para desagraviar los Corazones de Jesús y de María, decimos:

Dios mío, yo creo, adoro, espero y os amo.

Os pido perdón por los que no creen, no adoran,

 no esperan y no os aman. (3 veces)

***

Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo,

Os adoro profundamente y Os ofrezco

el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma

y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo,

presente en todos los sagrarios de la tierra,

en reparación por los ultrajes, sacrilegios e indiferencias

con que Él mismo es ofendido

y por los méritos infinitos de su Sacratísimo Corazón

y del Corazón Inmaculado de María,

os pido la conversión de los pobres pecadores. Amén.

 

w Consideración diaria.

DÍA 25.

EL CORAZÓN DE LA SIEMPRE VIRGEN

La segunda blasfemia es la de aquello que rechazan el dogma de la Virginidad perpetua de la Virgen.

La Iglesia ha confesado siempre la virginidad perpetua  de Nuestra Señora pues el Verbo fue concebido en su seno únicamente por el poder del Espíritu Santo, afirmando también el aspecto corporal de este suceso antes, en y después del parto. La concepción virginal es el signo de que es verdaderamente el Hijo de Dios. La concepción virginal es una obra divina que sobrepasa toda comprensión y toda posibilidad humanas. Nuestra Señora es a la vez virgen y madre siendo así imagen y la más perfecta realización de la Iglesia.

Han sido muchos los que se han opuesto a lo largo de la historia a la virginidad de Nuestra Señora: no creyentes, judíos y paganos, como también pseudocristianos como los protestantes y modernistas. Su falta de fe y sus dudas en la virginidad de María tienen su raíz en que no conocen verdaderamente a Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre.

Nuestro pueblo español y los pueblos hermanos de Hispanoamérica han profesado tal fe a la Virginidad de María, que para referirnos a ella utilizamos la expresión la Virgen, la Santísima Virgen. Tristemente, también los blasfemos utilizan este apelativo para insultarla y proferir sus palabras soeces.

Reparar las blasfemias contra la Virginidad de María, incluye también reparar el gran pecado de soberbia del hombre que se cree dueño absoluto de su propia vida. Por eso, entendemos también dentro de estas blasfemias está los pecados contra la vida, ya en su concepción con el aborto, ya en su final, con la eutanasia.

Reparar las blasfemias contra este dogma de la Virgen implica también todos los pecados de la carne en los que se incluyen, no solo, pero también los pecados de impureza. Hoy día idolatramos el cuerpo por un lado prenda de exhibición, faltando al pudor y a la castidad; y por otro lo maltratamos entregándolo a prácticas dañinas de drogas u otras sustancias, olvidando que somos templo del Espíritu Santo. 

Al reparar el Corazón Inmaculado por las blasfemias contra su  Virginidad Perpetua reparamos también los pecados de aquellos que piensan que es imposible vivir en gracia, desconfiando así del poder de Dios, desistiendo de la lucha contra el pecado y abandonándose a sus más bajas pasiones. Muchos rechazan este dogma para justificarse en sus pecados de impureza y para no luchar contra la pasión de la lujuria.

Finalmente, reparar estos pecados contra la Virginidad incluye también reparar los pecados de las almas consagradas –sacerdotes y religiosos- y las actitudes de resistencia, dilación o rechazo a responder a la vocación que Dios ha dado: ya sea consagrándose a él ya contrayendo matrimonio y formando una familia.

 

wOraciones para terminar todos los días:

Terminemos nuestra oración, haciendo un acto de reparación al Inmaculado Corazón de María:

·        En reparación por las blasfemias y ultrajes que se cometen contra la Inmaculada Concepción de María. (Avemaría)

·        En reparación por las blasfemias y ultrajes que se cometen contra la Virginidad perpetua de Nuestra Señora. (Avemaría)

·        En reparación por las blasfemias y ultrajes que se cometen contra la maternidad divina de María, rechazando al mismo tiempo recibirla como Madre de los hombres. (Avemaría)

·        En reparación por aquellos que infunden en los niños y en los jóvenes el desprecio hacia la Virgen Inmaculada. (Avemaría)

·        En reparación por aquellos que ultrajan, desprecian y maltratan las imágenes y representaciones de la Virgen Santísima. (Avemaría)

***

CONSAGRACIÓN AL INMACULADO CORAZÓN

de San Antonio María Claret

¡Oh, María! Madre de Dios y Madre nuestra, a Vos acudimos para consagrarnos a vuestro Inmaculado Corazón para que reines en nuestros corazones y en nuestra familia y nos ponemos bajo tu protección maternal.

Os consagramos nuestros cuerpos y nuestras almas, nuestra familia, nuestro hogar; todo cuanto somos y tenemos. Y para que esta consagración sea eficaz y verdadera, renovamos a vuestros pies las promesas que en nuestro nombre hicieron nuestros padres en el bautismo.

Renunciamos a las seducciones del mundo, enemigo de Dios y nuestro; sus criterios de riquezas, honores y placeres; sus escándalos y pecados. Renunciamos a nuestras malas pasiones y a las intrigas del demonio.

Y nos comprometemos a conservar nuestra fe, santificar nuestras costumbres y seguir los dictados del Magisterio de la Santa Iglesia Católica fundada por Nuestro Señor Jesucristo y frecuentar los Santos Sacramentos. Amén.

***

Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío.

Inmaculado Corazón de María, sed la salvación mía.

Glorioso Patriarca san José, ruega por nosotros.

Santos Ángeles custodios, rogad por nosotros.

Todos los santos de Dios, rogad por nosotros.

Ave María Purísima, sin pecado concebida.