6 de agosto. Conmemoración de los Santos Sixto II Papa, y Felicísimo y Agapito Mártires
Sixto, ateniense, convertido de filósofo en discípulo de Cristo, fue acusado en la persecución de Valeriano de predicar la fe cristiana; arrestado y conducido al templo de Marte, le amenazaron con la pena capital si no sacrificaba a este ídolo. Mas él se negó a tal impiedad. Al dirigirse al suplicio, encontró a San Lorenzo, quien le dijo contristado: “Adónde vais, oh padre, sin vuestro hijo? ¿Adónde vais, oh santo Pontífice, sin vuestro Diácono?” A lo que Sixto respondió: “No te abandono, hijo mío; mayores combates te están reservados por la fe de Jesucristo. En tres días vendrás a reunirte conmigo: al Pontífice le seguirá el Levita; entre tanto, si algo te queda de los tesoros de la Iglesia, dalo a los pobres”. Sixto padeció la muerte ese mismo día, junto con los diáconos Felicísimo y Agapito y los subdiáconos Jenaro, Magno, Vicente y Esteban. Fue sepultado en el cementerio de Calixto, el día 8º de los idus de agosto; los demás en el cementerio de Pretextato. Ocupó la Santa Sede 11 meses y 12 días. En una ordenación de diciembre, ordenó 4 Presbíteros y 7 Diáconos y consagró 2 Obispos.
Oremos.
¡Oh Dios, que nos concedes celebrar la solemnidad de tus santos mártires Sixto, Felicísimo y Agapito!; danos el gozo de su compañía en la eterna bienaventuranza. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, Dios, por todos los siglos de los siglos. R. Amén.