NOVENA A LA DIVINA MISERICORDIA
Segundo día
Hoy, tráeme a las almas de los sacerdotes y las almas de los religiosos, y sumérgelas en mi misericordia insondable. Fueron ellas las que me dieron fortaleza para soportar mi amarga Pasión. A través de ellas, como a través de canales, mi misericordia fluye hacia la humanidad.
Jesús misericordiosísimo, de quien procede todo bien, aumenta tu gracia en nosotros para que realicemos dignas obras de misericordia, de manera que todos aquellos que nos vean, glorifiquen al Padre de misericordia que está en el cielo.
Padre eterno, mira con misericordia al grupo elegido de tu viña, a las almas de los sacerdotes y a las almas de los religiosos; otórgales el poder de tu bendición. Por el amor del Corazón de tu Hijo, en el cual están encerradas, concédeles el poder de tu luz para que puedan guiar a otros en el camino de la salvación, y a una sola voz canten alabanzas de tu misericordia sin límite por los siglos de los siglos. Amén.
Se reza la coronilla de la Divina Misericordia.
CORONILLA DE LA DIVINA MISERICORDIA
ORACIONES INICIALES
Por la señal + de la Santa Cruz de nuestros + enemigos líbranos, Señor, +Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo + y del Espíritu Santo. Amén.
Padre nuestro, que estás en el cielo. Santificado sea tu nombre. Venga a nosotros tu Reino. Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación. Y líbranos del mal. Amen.
Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén
Creo en Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor; que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo: nació de Santa María Virgen; padeció bajo el poder de Poncio Pilato; fue crucificado, muerto y sepultado; descendió a los infiernos; al tercer día resucitó de entre los muertos; subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre Todopoderoso; desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo; la Santa Iglesia Católica; la comunión de los santos; el perdón de los pecados; la resurrección de la carne; y la vida eterna. Amén.
ORACIONES
DE LAS DECENAS DE LA CORONILLA
En la cuenta del Padrenuestro:
Padre Eterno, yo te ofrezco
el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad
de Tu Amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo,
como propiciación por nuestros pecados
y los del mundo entero.
Después se dice 10 veces:
Por su dolorosa Pasión,
ten misericordia de nosotros y del mundo entero".
Al terminar cada decena o al final de la cinco:
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal,
ten misericordia de nosotros y del mundo entero".
Se termina recitando la Salve.