LA PATERNIDAD NO ES SOLO FÍSICA; SINO TAMBIÉN
ESPIRITUAL
Reflexión diaria del Compendio de la Doctrina Social de la
Iglesia (n.235-236)
La paternidad y la
maternidad representan un
cometido de naturaleza no simplemente física, sino espiritual; en efecto,
por ellas pasa la genealogía de la persona, que tiene su inicio eterno en Dios
y que debe conducir a Él. Acogiendo
la vida humana en la unidad de sus dimensiones, físicas y espirituales, las
familias contribuyen a la « comunión
de las generaciones », y dan
así una contribución esencial e insustituible al desarrollo de la sociedad. Por
esta razón, «la familia tiene derecho a la asistencia de la sociedad en lo
referente a sus deberes en la procreación y educación de los hijos. Las parejas
casadas con familia numerosa, tienen derecho a una ayuda adecuada y no deben
ser discriminadas.