jueves, 31 de mayo de 2018

EVANGELIO DEL DÍA: QUIEN COMA DE ESTE PAN, VIVIRÁ ETERNAMENTE

SOLEMNIDAD DEL CORPUS CHRISTI
Forma Extraordinaria del Rito Romano
En aquel tiempo: Dijo Jesús a las turbas de los judíos: Mi carne verdaderamente es comida, y mi sangre, verdaderamente bebida, quien come mi carne y bebe mi sangre, en mi mora y yo en él. Así como vive el Padre que me envió, y yo vivo por el  Padre; así, el que me come, también vivirá por mí. Éste es el pan que ha bajado del celo, No sucederá como a nuestros padres, que comieron el maná, y murieron. Quien coma este pan, vivirá eternamente.
Juan 6, 56-59
COMENTARIO AL EVANGELIO
Homilía de maitines CRISTO VIDA ETERNA. San Agustín
Benedicto XVI LA SACRALIDAD DE LA EUCARISTÍA

EL ROSARIO DEL BEATO NICOLÁS BARRÉ



Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial: 
Se hace hoy memoria del beato Nico lás Barré, presbítero, el cual, siendo maestro de teología y célebre director de almas en el espíritu del Evangelio, fundó por toda Francia las Escuelas Cristianas y de Caridad, así como las Hermanas Maestras del Niño Jesús, para la educación gratuita de niños pobres. Con algunas de sus máximas meditamos el rosario de hoy.
Señor mío Jesucristo... 
MISTERIOS LUMINOSOS
1.-El Bautismo del Señor en el Jordán
“El que comienza tarde a conocer a Dios y a convertirse, viéndose ya avanzado en edad, debe redoblar el paso. Se recrea cual atleta corriendo su carrera.”
2.-El Milagro de las Bodas de Cana
“No hay que dar tantas vueltas sobre nosotros mismos. Vale más mirar a Dios y mantenernos ante El, como pobres mendigos que esperan el socorro de su generosa misericordia, en una infinitud de miserias que nos agobian. También tenemos que levantar los ojos hacia la Santísima Virgen, los ángeles y los santos.”
3.- El anuncio del Reino invitando a la conversión.
“La primera y principal ocupación del cristiano es combatir y destruir sus pasiones, y sobre todo la que domina más en él.”
4.-La Transfiguración del Señor
“Jesús siempre bajó: del cielo, de la montaña, a la tumba, a los infiernos.”
5.- La institución de la Eucaristía
“Hay que seguir a Jesucristo hasta la destrucción total del amor a nosotros mismos, y de la más pequeña pasión desordenada.”

MARÍA ESTRELLA DE LA MAÑANA. (31) Beato John Henry Newman



31 DE MAYO
Sobre la Asunción (8)
MARIA,
Stella Matutina,
ESTRELLA DE LA MAÑANA
QUE ANUNCIA SIEMPRE AL SOL
DESPUES DE LA NOCHE SOMBRIA
¿Cuál es el símbolo en este mundo sensible, que más se aproxima a una representación, por poco exacta que sea, de las glorias de aquel mundo superior que se abre más allá del alcance de nuestros sentidos corporales? ¿Cuáles son acá abajo, entre las cosas raras y esplendidas, las prendas y los signos más verdaderos, aunque pobres e insuficientes, de lo que esperamos ver un día? Sean cuales fuere estos signos y estas prendas, la bienaventurada Madre de Dios puede reivindicarlos como suyos. Los hay de dos clases, que le son aplicados con títulos de alabanza en las letanías: las estrellas del cielo y las flores de la tierra. Ella es, a la vez, Rosa mystica y Stella matutina.
Y de estos dos títulos, que se adaptan tan bien a Ella, el de Estrella de la mañana, es el que mejor le cuadra, y esto por tres razones.
En primer lugar, la rosa pertenece a esta tierra, pero la estrella esta puesta en lo más alto de los cielos. Y María ya no tiene cosa alguna en este mundo. Ningún cambio, ninguna violencia del fuego, del aire, de la tierra, puede afectar a las estrellas, las cuales se muestran siempre brillantes y maravillosas a todas las regiones del globo y a todas las tribus de los hombres.
En segundo lugar, la vida de la rosa es breve; su decadencia es segura, y cuando, ya en su zenit, está llena de gracias y perfumes. María, en cambio como las estrellas, subsiste para siempre, tan radiante hoy como el día de su Asunción, y cuando su Hijo aparezca para juzgar al mundo será tan pura y perfecta como ahora.
Finalmente, es prerrogativa de María ser Estrella de la mañana, que anuncia al sol. No brilla por sí mismos, ni de sí misma, sino que es reflejo de su Redentor y del nuestro, al cual glorifica. Cuando ella se muestra, en medio de las tinieblas, sabemos que Él está cerca. Él es al Alfa y Omega, el primero y el último, el comienzo y el fin. He aquí que viene pronto, con su recompensa, para dar a cada uno según sus obras – “Vengo pronto” – Amen. “¡Venid, Señor Jesús!”·
Beato John Henry Newman
Transcripto por gentileza de Dña. Ana María Catalina Galvez Aguiló

miércoles, 30 de mayo de 2018

EL ROSARIO DE HOY CON SANTA MATILDE DEL SAGRADO CORAZÓN TELLEZ ROBLES




Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial:  En la fecha de su nacimiento, se hace memoria de la beata Matilde del Sagrado Corazón Téllez Robles, virgen, que, viendo en el prójimo la imagen del mismo Cristo, se dedicó con solicitud a la ayuda no sólo material, sino también espiritual, de los necesitados y fundó con este fin la Congregación de las Hijas de María Madre de la Iglesia.
Señor mío Jesucristo... 
MISTERIOS GLORIOSOS
1.-La Resurrección del Señor.
Alma mía, detente un momento ante un sagrario y probarás el silencio y la paz interior que te permite gozar.
2.- La Ascensión del Señor
“El que tiene aspiraciones del cielo, necesita conservar la paz del alma.”
3.- La Venida del Espíritu Santo sobre los Apóstoles reunidos en torno a la Virgen María
“Dios es el alma de nuestras vidas, el que nos fortalece y anima en todo momento.”
4.- La Asunción de María Santísima a los Cielos
“Mi tesoro, mi descanso, mi centro, mi vida, mi ambición, mi fuerza, mi riqueza, mi refugio, mis aspiraciones. ¡todo lo eres tú, Señor!.”
5.- La Coronación De La Virgen Como Reina Y Señora De Todo Lo Creado.
“Sea toda nuestra vida un acto de amor.”

MARÍA VIRGEN FIEL. (30) Beato John Henry Newman



30 DE MAYO
Sobre la Asunción (7)
MARIA,
Virgo Fidelis,
VIRGEN FIEL
Este título conviene especialísimamente a la bienaventurada Virgen María, después de su Asunción y de su gloriosa coronación a la derecha de su divino Hijo. Esta conveniencia aparecerá evidente, si consideramos algunos casos de fidelidad, de los cuales se habla en las Sagrada Escritura.
La palabra fidelidad significa lealtad a un superior o exactitud en el cumplimiento de un compromiso. En este último significado, se aplica al mismo Dios, el cual, llevado de su gran amor a nosotros, se ha dignado mediante promesa y pacto con sus criaturas, poner límites a su omnipotencia en el obrar. Nos ha dado palabra y nos ha prometido que si le tomamos por herencia nuestra y nos ponemos en sus manos, nos guiara a través de todas las pruebas y de todas las tentaciones hasta hacernos llegar al cielo. Y para alentarnos y movernos a confianza, nos recuerda en varios pasajes de la Escritura que es el fiel Creador, el Dios fiel.
De la misma manera, sus verdaderos santos y siervos llevan también el título especial de fieles, como guardadores para con Él de la verdad de su alianza, como Él la guarda para con ellos; como obedientes a su voluntad con sencillez; como celosos de su gloria; como cuidadosos de los intereses sagrados que les ha sido confiados. Así, Abraham es llamado fiel; Moisés es declarado fiel en el cumplimiento de su misión; David, en este sentido es llamado “hombre según el corazón de Dios”; San Pablo da gracias a Dios, porque “le ha juzgado fiel”; y, en el último día, dirá Dios a todos los que hayan empleado bien sus talentos: “Muy bien, siervo bueno y fiel.”
María es fiel, de una manera preeminente a su Hijo y Señor. Que nadie suponga un solo momento que María no es celosa de su honor, o, como se imaginan los no católicos, que el ensalzar a Maria, es ser infiel a Jesús. Los verdaderos servidores de María son también los más seguros siervos de Jesucristo. Aunque la Virgen recompensa magníficamente a sus amigos, con todo consideraría como enemigo a quien la antepusiese a Él, que, si bien es celoso del honor de su Madree, lo es igualmente del suyo. Él es la fuente de la gracia, y todos los dones de la Madre dimanan de la bondad del Hijo. Oh María, enséñanos a adorar siempre a vuestro Hijo como único Creador, y a ser devotos vuestros como a la más favorecida de las criaturas.
Beato John Henry Newman
Transcripto por gentileza de Dña. Ana María Catalina Galvez Aguiló