SOLEMNIDAD DEL CORPUS
CHRISTI
Forma Extraordinaria
del Rito Romano
En
aquel tiempo: Dijo Jesús a las turbas de los judíos: Mi carne verdaderamente es
comida, y mi sangre, verdaderamente bebida, quien come mi carne y bebe mi
sangre, en mi mora y yo en él. Así como vive el Padre que me envió, y yo vivo
por el Padre; así, el que me come,
también vivirá por mí. Éste es el pan que ha bajado del celo, No sucederá como
a nuestros padres, que comieron el maná, y murieron. Quien coma este pan,
vivirá eternamente.
Juan 6, 56-59COMENTARIO AL EVANGELIO
Homilía de maitines CRISTO VIDA ETERNA. San Agustín
Benedicto XVI LA SACRALIDAD DE LA EUCARISTÍA