LA CREACIÓN DEL HOMBRE
La realidad nace de la Palabra como creatura Verbi.
La creación es el lugar en el que se desarrolla la historia de amor entre Dios
y su criatura; por tanto, la salvación del hombre es el motivo de todo.
El hombre tiene una posición única y singular en la
creación, por lo que debemos reconocer los dones preciosos del Creador: el
valor del propio cuerpo, el don de la razón, la libertad y la conciencia. También
lo que la tradición filosófica llama «ley natural». La escucha de la Palabra de Dios nos lleva
sobre todo a valorar la exigencia de vivir de acuerdo con esta ley «escrita en
el corazón».
Jesucristo dio a los hombres la Ley nueva que asume y
realiza de modo eminente la ley natural, liberándonos de la ley del pecado, dando
a los hombres, mediante la gracia, la participación a la vida divina y la
capacidad de superar el egoísmo.
Cfr. Verbum Domini 9