MARTES DE LA I SEMANA DE CUARESMA
Forma
Extraordinaria del Rito Romano
Evangelio según San Mateo 21,10-17
Al
entrar en Jerusalén, toda la ciudad se sobresaltó preguntando: «¿Quién es este?».
La multitud contestaba: «Es el profeta Jesús, de Nazaret de Galilea». Entró
Jesús en el templo y echó fuera a todos los que vendían y compraban en el
templo, volcó las mesas de los cambistas y los puestos de los vendedores de
palomas. Y les dijo: «Está escrito: “Mi casa será casa de oración, pero
vosotros la habéis hecho una cueva de bandidos”». Se le acercaron en el
templo ciegos y cojos, y los curó. Pero los sumos sacerdotes y los
escribas, al ver los milagros que había hecho y a los niños que gritaban en el
templo «¡Hosanna al Hijo de David!»,
se indignaron y le dijeron: «¿Oyes lo que dicen estos?». Y Jesús les
respondió: «Sí; ¿no habéis leído nunca: “De la boca de los pequeñuelos y de los
niños de pecho sacaré una alabanza”?». Y dejándolos salió de la ciudad, a
Betania, donde pasó la noche.