sábado, 27 de febrero de 2016

EL ROSARIO DE HOY CON SAN GABRIEL DE LA DOLOROSA


Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial: Se hace hoy memoria de san Gabriel de la Dolorosa, religioso pasionista que murió con 24 años. Al sentir la vocación religiosa, no dudo en abandonar el futuro prometedor que le ofrecía el mundo.  Se distinguió particularmente por su devoción a la Virgen Dolorosa y a la que decía: “Madre mía, mi paraíso son tus dolores.”
Imitemos su amor a la Virgen y ofrezcamos este rosario por aquellos jóvenes  que sienten la llamada a consagrarse a Dios para que respondan generosamente y para que los jóvenes cristianos sean luz y sal en medio de la sociedad. 
Señor mío Jesucristo...  
MISTERIOS GOZOSOS
1.- La encarnación del Hijo de Dios en las entrañas purísimas de la Virgen María.
“Soy muy feliz, más de lo que tú puedes imaginarte, ¡de verdad! Desde que Dios me llamó siento una dicha inmensa, un gozo íntimo que me llena de paz. Me quedaré aquí, y no te preocupes... ¿Sabes lo que vamos a hacer? Vamos a abandonarnos en brazos de nuestro Padre Dios, ¿quieres? El cuida de sus hijos".
2.-La Visitación de Nuestra Señora a su prima santa Isabel.
“Creo que por Vuestra humildad, ocultasteis a San José Vuestra Maternidad, aunque aparentemente pareciera necesario manifestárselo, y que servisteis a Sta. Isabel y que en la tierra buscasteis siempre el último puesto.”
3.-El nacimiento del Niño Dios en el portal de Belén
Creo que Vuestra dignidad es superior a todos los ángeles y santos y que es tanta Vuestra perfección, que solo Dios puede conocerla. Creo que después de Dios, es ser Madre de Dios, y que por tanto no pudisteis estar más unida a Dios sin ser el mismo Dios, como decía San Alberto.
4.-La purificación de Nuestra Señora y presentación del Niño Jesús en el templo
"¿Quieres amar? ¡Sí! Ama... pero a María. ¡Si supieras qué amor tan grande nos tiene nuestra Madre María!"
5.- El niño Jesús perdido y hallado en el templo

“Creo que, como revelasteis a Sta. Brígida, tuvisteis tan bajo concepto de Vos misma porque sabíais que todo lo habíais recibido de Dios, por ello en nada buscasteis Vuestra Gloria, sino la de Dios únicamente. Creo con San Bernardo que ninguna criatura del mundo es comparable con Vos en la humildad.”