LA IGLESIA EXPERTA EN HUMANIDAD
Reflexión diaria del Compendio de la Doctrina Social de la
Iglesia (nn. 60-61)
Después de haber considerado
el plan salvífico de Dios sobre la humanidad caracterizado por el amor y la
gratuidad divina que exige de nosotros la respuesta libre cuyo icono y ejemplo
preclarísimo es la Virgen María,
comenzamos hoy a ver la misión de Iglesia con respeto a la doctrina
social.
1.La primera idea que hemos
de tener presente es que la Iglesia es continuadora de la obra de Cristo. Ella
no tiene otra misión, ni otros gestos, ni otras palabras que no sean las de
Jesús. Y esto es importante, ya que la Iglesia no es un cuerpo autónomo que
puede ir “cambiando” de organización o de principios según convenga en cada
época histórica… Ella es cuerpo de Cristo y debe por tanto obedecer a su
Cabeza. Ella es convocada y enviada por Cristo y debe hacer aquello que Cristo
le ha encomendado.
2. La segunda idea con
respeto a la Iglesia es que –como afirma el Concilio- es como un sacramento:
sacramento de amor y de esperanza; pues ella en medio del mundo, en medio de
los hombres, hace presente a Dios y su plan de salvación. Ella es sacramento de
esperanza pues desde la fe en Jesucristo cree, trabaja, anuncia y espera un
cielo nuevo y una tierra nueva.
3.Utilizando la expresión
del Apocalípsis –tercera idea- la Iglesia es “la morada de Dios con los
hombres.” En la Iglesia, a pesar de los defectos y pecados históricos de los
miembros que la formamos, tenemos la seguridad poder encontrar a Dios. Lo
recordaba el Papa Francisco en los primeros días de su pontificado: “Creo en Jesús, en Dios, pero la Iglesia no
me interesa... ¿Cuántas veces hemos escuchado esto? Pero esto no está bien. Hay
quien considera que es mejor tener una relación personal, directa, inmediata
con Jesucristo, fuera de la comunión y de la mediación de la Iglesia. Son
tentaciones peligrosas y dañinas. Son, como decía el gran Pablo VI: dicotomías
absurdas. Es verdad que a veces caminar juntos cuesta, a veces es cansado:
puede pasar que algún hermano o hermana nos cree un problema o nos escandalice…
Pero el Señor ha confiado su mensaje de salvación a personas humanas, a todos
nosotros, a todos los hermanos y hermanas con sus dones y sus límites, y viene
hacia nosotros y se da a conocer. Esto significa pertenecer a la Iglesia.”
4. La Iglesia experta en
humanidad es el cuarto punto a considerar. Experta en humanidad porque la
Iglesia está cimentada y confiada en el Verdad absoluta y plena que es
Jesucristo, verdadero Dios, pero también verdadero hombre que revela a los
hombres su propio misterio. Experta en humanidad, por su experiencia como madre
universal de 2000 años… una experiencia que ninguna otra institución actual
posee... Por tanto, la Iglesia tiene una palabra de vida y de verdad que
ofrecer al hombre de toda condición llamado a realizarse en la construcción de
sus relaciones sociales.
Hoy, fiesta de nuestra
Señora de Lourdes, quisiera recordar unas palabras que Nuestra Señora dijo a
Bernardita: “No prometo hacerte feliz en la tierra, sino en el cielo.” Nos
equivocamos cuando ponemos toda nuestra expectativa en gozar de la felicidad
aquí en la tierra. La felicidad plena es en el cielo. Aquí podremos disfrutar
de instantes de felicidad en cuánto nos realizamos como personas en relación
con Dios y con los demás.
Que la Virgen de Lourdes,
nos conceda la gracia de vivir una santa cuaresma viviendo este evangelio de
salvación.