martes, 9 de febrero de 2016

A LOS HAMBRIENTOS LOS COLMA DE BIENES REFLEXIÓN DIARIA DEL COMPENDIO DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA (n. 59)

A LOS HAMBRIENTOS LOS COLMA DE BIENES
REFLEXIÓN DIARIA DEL COMPENDIO DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA (n. 59)
La Virgen María es imagen de la Iglesia: todo lo que en ella contemplamos, estamos nosotros llamados a ser. También en cuanto a la aplicación de la fe en la vida social.
El compendio de la Doctrina Social nos dice que la Virgen:
1. Acoge a Jesús  y el designio de amor de Dios en nombre de toda la humanidad.
2. En el Magnificat proclama la llegada del Salvador: “Aquel que derriba a los poderosos de sus tronos y exalta a los humildes, colma de bienes a los hambrientos y despide a los ricos con las manos vacías, dispersa a los soberbios y muestra su misericordia con aquellos que le temen (cf. Lc 1,50-53).”
A ejemplo de la Virgen estamos llamados a renovar “la conciencia de que no se puede separar la verdad sobre Dios que salva, sobre Dios que es fuente de todo don, de la manifestación de su amor preferencial por los pobres y los humildes.”
Y quizás, en nuestra interior, puede surgir un cierto juicio acerca de esto. Podemos pensar que es teología de la liberación o comunismo cristianizado… Quizás porque esta verdad nos resulte incómoda a nuestra conciencia materialista y consumista; quizás porque esta verdad denuncia nuestros despilfarros y nuestras incoherencias.
El Evangelio en el que hemos creído es que Cristo trae la salvación a todo el hombre ahora ya; no solamente una salvación espiritual o trascendental o ultraterrena. Y la Iglesia y, nosotros cristianos, estamos llamados a ser los canales actuales para esa salvación que Cristo quiere ofrecer al hombre de hoy.

Que nuestra Señora, la Virgen, así nos lo haga comprender y nos lo ayude a vivir: ser como ella un canal por donde corran los ríos de gracia y salvación a nuestro mundo.