jueves, 28 de noviembre de 2024

DÍA 29. CONQUISTA DEL CIELO. NOVÍSIMOS Y ORACIÓN POR LOS DIFUNTOS

DÍA VEINTINUEVE.

Conquista del Cielo.

BREVES MEDITACIONES SOBRE LOS NOVÍSIMOS

P. Juan Pedro Pinamonte, S.I.

y oración por los difuntos

 

ORACIÓN INCIAL

Por la señal…

 

Pongámonos en la presencia de Dios y adoremos su Divina Majestad.

 

Oh Dios mío, que condenándonos a la muerte, nos habéis ocultado el momento y la hora, haced que viviendo santamente todos los días de nuestra vida, merezcamos una muerte dichosa, abrasados en vuestro divino amor.

Haced que la meditación de las verdades últimas de la existencia del hombre sobre la tierra, nos sirvan de estímulo para arrepentirnos y detestar el pecado, y resolvernos a vivir y practicar la virtud.

Por los méritos de Nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina con Vos, en unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.

 

Se leen los puntos para cada día.

 

DÍA VEINTINUEVE.

Conquista del Cielo.

1.- Poco me pide Dios para salvarme: solo que observe su santa ley, ley facilísima, ley justísima, y ley suavísima.

2.- Y para esto poco, me ayuda Dios, poniendo lo principal de su parte con la gracia de sus inspiraciones, con el valor de sus méritos, con la eficacia de sus ejemplos.

3.- Esto poco, me lo remunera Dios con premio eterno, las tribulaciones momentáneas, y leves con un eterno gozo, los trabajos breves con galardón eterno; pocas penas con eterna Gloria.

 

FRUTO.

Sírvaos de estímulo la consideración del premio para hacer, y padecer cosas grandes por conseguirle, y decid tres veces el Pater noster, y Ave María, con Gloria Patri a la beatísima Trinidad, para que altamente os imprima en el corazón este conocimiento.

 

PARA FINALIZAR

Por el eterno descanso de los difuntos y las benditas almas del purgatorio:

Pater noster…

V/ . Libra, Señor, sus almas.

R/. De las penas del infierno.

V/. Descansen en paz.

R/. Amén.

V/. Señor, escucha mi oración.

R/. Y llegue a ti mi clamor.

V/ . El Señor esté con vosotros.

R/. Y con tu espíritu.

 

Oremos:

Oh Dios, que otorgas el perdón y buscas la salvación de los hombres, pedimos a tu clemencia por la intercesión de la Bienaventurada Virgen María y de todos tus santos, para las almas de tus siervos que han salido de este mundo, la gracia de tener parte en la beatitud eterna: principalmente para las almas de mis familiares, amigos y bienhechores difuntos, y de aquellas más necesitadas y olvidadas. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

 

V/. Concédeles, Señor, el descanso eterno.

R/. Y brille sobre ellos la luz eterna.

V/. Descansen en paz.

R/. Amén.

 

V/. Por la misericordia de Dios y la intercesión de la Virgen María las almas de todos los fieles difuntos descansen en paz.

R/. Amén.