miércoles, 14 de agosto de 2024

DE HACER LA VOLUNTAD DE DIOS. JUEVES DE LA DECIMOSEGUNDA SEMANA DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

 


DE HACER LA VOLUNTAD DE DIOS.

JUEVES DE LA DECIMOSEGUNDA SEMANA

DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

 

MEDITACIONES

PARA EL TIEMPO

DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

DE LA OBRA “VIDA Y DOCTRINA DE JESUCRISTO

SACADA DE LOS CUATRO EVANGELISTAS

Y DISTRIBUIDA EN MATERIA DE MEDITACIÓN

PARA TODOS LOS DÍAS” DEL P. NICOLÁS AVANCINI

 

 

ORACIÓN PARA COMENZAR

TODOS LOS DÍAS:

 

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Poniéndonos en la presencia de Dios, adoremos su majestad infinita, y digamos con humildad:

  

 “Omnipotente Dios y Señor y Padre mío amorosísimo, yo creo que por razón de tu inmensidad estás aquí presente en todo lugar, que estás aquí, dentro de mí, en medio de mi corazón, viendo los más ocultos pensamientos y afectos de mi alma, sin poder esconderme de tus divinos ojos.

    Te adoro con la más profunda humildad y reverencia, desde el abismo de mi miseria y de mi nada, y os pido perdón de todos mis pecados que detesto con toda mi alma, y os pido gracias para hacer con provecho esta meditación que ofrezco a vuestra mayor gloria… ¡Oh Padre eterno! Por Jesús, por María, por José y todos los santos enseñadme a orar para conocerme y conoceros, para amaros siempre y haceros siempre amar. Amén.”

 

Se meditan los tres puntos dispuestos para cada día.

 

JUEVES DE LA DECIMOSEGUNDA SEMANA

DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

DE HACER LA VOLUNTAD DE DIOS.

 

1.- No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hiciere la voluntad de mi Padre (1). No aprueba a aquellos. 1º. Que hacen por devoción algunas obras en sí buenas, pero dejan las de obligación. 2º. No aprueba decir muchas cosas y hacer pocas; conocer de Dios, muchas y sublimes cosas, y querer obrar pocas por Él. ¿No eres acaso tú del número de estos? Sabes y dices de Dios y de la virtud infinitas cosas. Pero ¿cuántas haces? Clamas en tus trabajos: Señor, Señor. Mas, ¿qué diligencia pones tú para salir de ellos?

2.- El que hiciere la voluntad de mi Padre, que en los cielos está, ese entrará en el reino de los cielos (2). Sentencia infalible. No entrarás por otra vía, que haciendo la voluntad de Dios. Pero, ¿cual es de Dios la voluntad? Ésta la muestran los superiores: El que a vosotros oye, a Mí me oye (3). Esta la muestran las reglas, que no son invenciones de hombres, sino de Dios. Esta la muestran los mandamientos divinos, las leyes y obligaciones de tu estado. Si no guardares e hicieres las palabras todas de la ley, aumentará Dios tus plagas, porque no oíste la voz del Señor Dios tuyo (4). Repara bien si tus obras concuerdan con la voluntad de Dios: como te portas en orden a lo que disponen los superiores: como en lo que mandan tus reglas, tus obligaciones, y en fin el gusto y los preceptos de Dios.

3.- Muchos me dirán a Mí en aquel día, Señor, Señor: Por ventura ¿no profetizamos en tu nombre y no lanzamos los demonios, etc.? Entonces les confesaré, que nunca os conocí (5). Enseñar, absolver pecadores, causar mociones grandes a los pueblos, son gracias gratis dadas, Si presentas a Dios solas estas cosas, oirás: No os conocí. Luego otras cosas te pide a ti Dios, que de alguna manera sean tuyas: tu cooperación, tus méritos. ¡Oh qué pobre has sido hasta ahora! ¿Comparecerás así delante de Dios? Añade lo que puedes, porque: Aunque hagas cuanto puedes, aún serás siervo inútil (6). Con todo no te pedirá Dios más de lo que puedas.

 

(1) Matth., 7. (2) Ibid. (3) Luc., 10 (4) Deut., 28.

(5) Matth., 7. (6) Luc., 17.

 

ORACIÓN PARA FINALIZAR

TODOS LOS DÍAS:

Os doy gracias, Dios mío, por los buenos pensamientos, afectos y propósitos que me habéis inspirado en este rato de oración…

Todo os lo ofrezco a vuestra mayor honra y gloria… y os pido gracia eficaz para ponerlos por obra…

¡Oh Padre Eterno! Por Jesús, por María, por José y Teresa de Jesús dadme gracia ahora y siempre para cumplir en todas las cosas vuestra santísima voluntad. Amen."

 

Padrenuestro, Avemaría y Gloria

***

Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.

Inmaculado Corazón de María, sed la salvación mía.

Glorioso Patriarca san José, ruega por nosotros.

Santos Ángeles Custodios, rogad por nosotros.

Todos los santos y santas de Dios, rogad por nosotros. 

***

¡Querido hermano, si te ha gustado esta meditación, compártela con tus familiares y amigos!

***

Ave María Purísima, sin pecado concebida.