BIBLIA Y ECUMENISMO
Reflexión diaria acerca de la Palabra de
Dios
En la Escritura encontramos la petición vibrante de Jesús al Padre de que
sus discípulos sean una sola cosa, para que el mundo crea (cf. Jn
17,21). Todo esto nos refuerza en la convicción de que escuchar y meditar
juntos las Escrituras nos hace vivir una comunión real entre los creyentes. A
esta comunión están llamados a participar todos aquellos que viven en la
herejía y el error.
Para que venga a la unidad de la Iglesia, es necesario escuchar juntos la
Palabra de Dios, practicar la lectio divina de la Biblia; dejarse
sorprender por la novedad de la Palabra de Dios, que nunca envejece ni se
agota; superar nuestra sordera ante las palabras que no concuerdan con nuestras
opiniones o prejuicios; escuchar y estudiar en la comunión de los creyentes de
todos los tiempos.
Cfr. Verbum Domini, 46