HOMILÍA DEL OFICIO DE MAITINES SOBRE
EL EVANGELIO DEL DOMINGO
XXIV DOMINGO
DESPUÉS DE PENTECOSTÉS
V DOMINGO DESPUÉS
DE EPIFANÍA TRANFERIDO
Forma
Extraordinaria del Rito Romano
Homilía de San Agustín, obispo
Mientras
los pastores de la Iglesia se mostraban negligentes, o cuando los Apóstoles
hubieron muerto, vino el diablo, e introdujo a aquellos a que el Señor llama
hijos malos. Ahora bien, esto presupuesto, se pregunta si estos son los herejes
o los católicos que viven mal. Ya que los herejes pueden ser llamados hijos
malos, porque nacidos de la misma semilla del Evangelio y llevando el nombre de
Cristo, por sus perversas opiniones, abrazan los falsos dogmas.
Mas
diciendo que están sembrados en medio del trigo, parase indicar los que forman
parte de una misma comunión. Con todo por lo mismo que el Señor reconoció que
este campo significaba, no la Iglesia, sino este mundo, bien pueden entenderse
los herejes, los cuales, no por la sociedad de una Iglesia o de una fe, sino
por la común denominación de cristianos, se hallan en este mundo mezclados con
los buenos. Los que son malos dentro del seno de la fe verdadera son
comparables más bien a la paja que a la cizaña, ya que la paja tiene el mismo
origen y la misma raíz que el trigo.
Por aquella red en la que
son contenidos los peces malos y los buenos, no sin motivo se designan los
malos católicos. Una cosa es el mar, por lo cual se indica este mundo, y otra
la red, que parece significar la comunión de una fe o de una Iglesia. Esta es a
la verdad la diferencia que existe entre los herejes y los malos católicos, a
saber que los herejes creen doctrinas falsas, y los malos católicos, creyendo
lo verdadero, no viven conforme a lo que creen.