LA VIRGEN, PROFETISA SOBRE LA CUAL DESCENDIÓ EL ESPÍRITU SANTO. San Basilio
De la exposición de San Basilio, Obispo, sobre el Profeta Isaías.
Sobre el cap. 8.
Me acerqué a la profetisa, dice Isaías, y ella concibió y dio a luz un hijo. Y que fuese María esta profetisa a la que se acercó Isaías por medio de un conocimiento profético y espiritual, no lo negará nadie que tenga presentes las palabras que pronunció María bajo la influencia del Espíritu que inspira a los profetas. Y en efecto, ¿qué dice María? “Mi alma glorifica al Señor, y mi espíritu se alegra en Dios, mi Salvador; porque ha mirado la humildad de su sierva, he aquí que todas las generaciones me llamarán bienaventurada”. Ninguno de los que atentamente consideren estas palabras se atreverá seguramente a discutir lo que significan, negando que fuese profetisa aquella sobre la cual “descendió el Espíritu Santo” y a la que “el Altísimo cubrió con su sombra”.