LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR
Forma Extraordinaria
del Rito Romano
En aquel tiempo, se apareció
Jesús a los Once, cuando estaban a la mesa, y les echó en cara su incredulidad
y dureza de corazón, porque no habían creído a los que lo habían visto
resucitado. Y les dijo: «Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la
creación. El que crea y sea bautizado se salvará; el que no crea será
condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en
mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben
un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y
quedarán sanos». Después de hablarles, el Señor Jesús fue llevado al cielo y se
sentó a la derecha de Dios. Ellos se fueron a predicar por todas partes, y el
Señor cooperaba confirmando la palabra con las señales que los acompañaban.
Mc l6, 14-20