EL
AMOR DE NOS PRIMEREA DESDE LA CREACIÓN
REFLEXIÓN DIARIA DEL COMPENDIO DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA
(n. 26)
26 La
reflexión profética y sapiencial alcanza la primera manifestación y la fuente
misma del proyecto de Dios sobre toda la humanidad, cuando llega a formular el
principio de la creación de todas las cosas por Dios.
Israel conoce a Dios que se manifiesta en
la liberación de la Esclavitud como “Yo soy el que soy” y como “el Dios que
salva”. Este Dios es el Dios de los dioses y Señor de los Señores, él es el
único Señor: de ahí se llega al conocimiento de Dios como creador de todas las
cosas: él es el origen, principio y fin de todas las cosas; y él ha puesto en
la creación sus leyes eternas.
El sentido de la propia existencia del
pueblo y de cada persona en particular nace de descubrir el proyecto creador de
Dios que ha creado al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza para una relación
libre de amistad con él.
Pero sobre todo, la fe en Dios creador nos
ha de hacer caer en la cuenta de la bondad de Dios y su amor gratuito. Dios no da
lo que no se puede comprar ni vender: su amor.
Es necesario anunciar esta verdad al
hombre de hoy sumido tantas veces en el sinsentido: Dios te ha creado por amor
y quiere amarte ahora y por toda la eternidad.
Para nuestra vida de fe es importante
tener presente siempre esto: Dios tiene siempre la iniciativa gratuita. Él –como
dice el Papa Francisco- nos primerea. Y ante la gratuidad de su amor, hemos de
responder también