IX DOMINGO DESPUES DE PENTECOSTÉS
FORMA
EXTRAORDINARIA DEL RITO ROMANO
En aquel tiempo: Al llegar
Jesús cerca de Jerusalén mirando a la ciudad, lloró sobre ella, diciendo: ¡Ah,
sí conocieses también tú, en este día, el mensaje de la paz! Mas ahora está
oculto a tus ojos. Sí, vendrán días sobre ti, en que te circunvalaran tus
enemigos y te rodearán y te estrecharán por todas partes, y te arrasarán con
tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por no haber
conocido el tiempo en que Dios te ha visitado. Y habiendo entrado en el templo
comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban en él, diciéndoles: Escrito
está: ¡Mi casa es casa de oración; Y vosotros la tenéis convertida en cueva de
ladrones! y enseñaba todos los días en el templo.
Lc 19.41-47