viernes, 3 de noviembre de 2023

DÍA 4.- EL PURGATORIO, OTORGADO POR LA DIVINA MISERICORDIA

DÍA 4

EL PURGATORIO,

OTORGADO POR LA DIVINA MISERICORDIA

 

MES DE NOVIEMBRE PARA LA REFORMA

Y PERFECCIÓN DE LA VIDA

A LA LUZ DEL PURGATORIO Y POR MEDIO DE LA DEVOCIÓN A LAS BENDITAS ALMAS

D. Felix Sardá y Salvany

 

+Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

ACTO DE CONTRICIÓN

Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Redentor y Salvador mío, que habéis de ser un día Juez inexorable de mi pobre alma: a vuestros pies se presenta la mía llena de confusión por sus muchos pecados y por la enorme deuda que por ellos tiene pendiente ante vuestro justísimo tribunal. Perdonádselo todo, oh, amantísimo Jesús, por los méritos de vuestra Sangre, que es de valor infinito, pues ya arrepentido y humillado os pido perdón y reconciliación. Concedédmelo por las lágrimas de vuestra dolorida Madre, que lo es de un modo particular de los pecadores como yo, y por lo mucho que amáis a vuestras esposas, las almas del Purgatorio, en cuya utilidad y sufragio me propongo practicar este piadoso ejercicio. Amén.

 

Meditación diaria

DIA 4

EL PURGATORIO,

OTORGADO POR LA DIVINA MISERICORDIA

 

I

Tal vez se nos haga extraña esta idea, que en este asunto es muy consoladora, En efecto, el Purgatorio no es solamente un tributo que el alma pecadora rinde a la justicia de Dios, sino que es principalmente el último beneficio que al alma otorga su misericordia infinita. El alma, deudora con su Divina Majestad, debería satisfacer por sus deudas durante el plazo de su vida terrena, por medio de la penitencia. Después de este plazo perentorio y limitado por el número de sus presentes días, podría ser declarada insolvente con perpetua insolvencia y perpetuamente privada de la entrada en la, gloria del cielo. Ni un minuto más se le concede de vida para expiar sus culpas caducado el plazo fatal. La muerte inexorable se interpone entre ella y Dios para eternamente tenerla alejada de su adorable presencia. Mas, he aquí cuan ingeniosa ha sido para el alma deudora la Divina Misericordia. Sin detener el plazo de la muerte, halló medio para que, aún después de ésta, pudiese hacer penitencia y verificar su expiación Este medio es el Purgatorio. Se suspende, por decirlo así, la ejecución del deudor, se alarga el plazo para el pago, se facilitan recursos para una honrosa liquidación. El Divino Acreedor espera un poco más, el alma satisface cumplidamente ante su justicia por esta prórroga que concede su misericordia y logra, mediante ésta, lo que de otro modo hubiera debido considerar eternamente frustrado, Por medio del Purgatorio hacemos penitencia de nuestras faltas, aún después de la muerte, cuando ya para toda penitencia quedaban cerradas absolutamente las puertas.

 

II

Gracias os doy, Jesús mío misericordiosísimo, por este beneficio inmenso que deben las almas todas y deberá la mía a vuestra bondad, y mediante el cual aun después de morir no quedaré enteramente imposibilitado de satisfacer ante Vos por mis culpas de la vida presente. ¿Quién pudiera lisonjearse con la esperanza de entrar en el descanso de la gloria, si no fuera por este privilegio que concedéis a vuestros deudores, para facilitar sus pagos sin detrimento de vuestra justicia y con grande honor y gloria de vuestra misericordia? Os ofrezco, divino Jesús, en este día y para más cumplidamente agradeceros esta dignación, la primera Sangre que en vuestra Pasión derramasteis, cuando de vuestro Sagrado Cuerpo corrió hasta regar la tierra, durante la agonía que por mí sufristeis orando en el Huerto de Getsemaní. Hago mías, dulcísimo Jesús, pues por mí las vertisteis., cada una de aquellas preciosas gotas de sangriento sudor, y las recojo y guardo como divino tesoro, con el que en vida y después de ella tengo caudal para satisfacer por todos mis atrasos. Mas no quiero, Señor y Jesús mío, que sea únicamente para mí el provecho de tales bienes. Sean igualmente para todas las almas que ya ahora gimen por sus deudas en las cárceles del Purgatorio, para que a ellas sea también aplicado su valor y vuelen cuanto antes, saldadas sus cuentas, al reposo de la felicidad eterna, por la clara visión y posesión de vuestra Divinidad. Muy particularmente os lo pido por aquellas con quien me liga especial obligación de justicia o de caridad, o por las que, olvidadas de sus amigos en la tierra, tienen más necesidad de mis pobres sufragios. Amén.

 

ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS

Os ofrezco, piadosísimo Señor y Padre mío, los rezos y demás actos de este día en sufragio de las benditas almas del Purgatorio, suplicándoos por vuestra infinita bondad y por los dolores y lágrimas de vuestra Madre y mía María Santísima, el consuelo y alivio y final descanso de aquellas vuestras esposas por la gracia y hermanas mías por la fe y la caridad. De un modo particular os recomiendo las de mis padres, parientes, amigos y bienhechores, por quien tengo sin duda mayor obligación; las de cuantos por mi causa estén en aquellas acerbas penas; las de los que están más olvidados de todos y más necesitados de mi pobre sufragio. ¡Oh, Señor y Padre mío! Aceptad en descuento de sus deudas ante vuestra eterna justicia mis humildes satisfacciones, y muy particularmente cada uno de los actos de este Mes, y concededme ser, como mis hermanas las almas del Purgatorio, eficazmente ayudado, cuando en él se halle la mía. Amén.

***

En recuerdo de la Sagrada Pasión de nuestro Salvador y en sufragio de las benditas almas:

5 padrenuestros, Avemaría y Gloria.

 

Requiem æternam dona eis, Domine, et lux perpetua luceat eis.

Requiescant in pace. Amen.

Fidelium animae per misericordiam Dei requiescant in pace. Amen.