DÍA 16. VISITA DIARIA A SAN JOSÉ. San Alfonso María de Ligorio
ORACIONES PARA TODOS LOS DÍAS
Al comenzar:
Visita diaria a san José en el mes de marzo.
Por la señal de la santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Poniéndonos en la presencia de Dios, (breve silencio)
pidiendo el auxilio de la Virgen María (breve silencio)
y del Ángel Custodio, (breve silencio)
invoquemos al Glorioso San José:
Oración a san José
Acordaos, purísimo Esposo
de la Santísima Virgen María,
dulce protector mío San José,
que jamás se ha oído decir que ninguno
de los que han acudido a vuestra protección
y reclamando vuestro auxilio,
haya quedado sin consuelo.
Con esta confianza vengo a vuestra presencia
y me encomiendo fervorosamente a Vos.
No despreciéis mi súplica,
¡Oh Padre adoptivo del Redentor!,
antes bien, acogedla benignamente. Amén
Indulgencia de 500 días
DÍA 16. VISITA AL PATRIARCA SAN JOSÉ
Considera cuál fue el amor y la ternura de José al mirar con sus propios ojos al Hijo de Dios hecho Niño, oyendo al mismo tiempo a los ángeles, que cantaban alrededor de su recién nacido Señor. (breve silencio)
***
Afortunado Patriarca,
por aquel consuelo que experimentasteis
al ver por vez primera a Jesús Niño
tan bello y gracioso,
alcanzadme la dicha de que yo también
le ame con vivo amor en la tierra,
para ir después un día a gozar con Él en el Paraíso.
***
Repite durante este día, muchas veces,
la siguiente jaculatoria:
Concededme, bendito José,
constante amor a Jesús y a María.
Para finalizar:
LETANÍAS A SAN JOSÉ
Indulgencia de 5 años, cada vez que se recitan. Indulgencia plenaria si diariamente se recitan devotamente durante un mes. Pio XI, 25 de marzo de 1935
Señor, ten misericordia de nosotros
Cristo, ten misericordia de nosotros.
Señor, ten misericordia de nosotros.
Cristo óyenos.
Cristo escúchanos.
Dios Padre celestial,
ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo.
Dios Espíritu Santo.
Santa Trinidad, un solo Dios.
Santa María,
ruega por nosotros.
San José,
ruega por nosotros.
Ilustre descendiente de David.
Luz de los Patriarcas.
Esposo de la Madre de Dios.
Casto guardián de la Virgen.
Padre nutricio del Hijo de Dios.
Celoso defensor de Cristo.
Jefe de la Sagrada Familia.
José, justísimo.
José, castísimo.
José, prudentísimo.
José, valentísimo.
José, fidelísimo.
Espejo de paciencia.
Amante de la pobreza.
Modelo de trabajadores.
Gloria de la vida doméstica.
Custodio de Vírgenes.
Sostén de las familias.
Consuelo de los desgraciados.
Esperanza de los enfermos.
Patrón de los moribundos.
Terror de los demonios.
Protector de la Santa Iglesia.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo:
perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo:
escúchanos, Señor,
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo:
ten misericordia de nosotros.
V.- Le estableció señor de su casa.
R.- Y jefe de toda su hacienda.
Oremos: Oh Dios, que en tu inefable providencia, te dignaste elegir a San José por Esposo de tu Santísima Madre: concédenos, te rogamos, que merezcamos tener por intercesor en el cielo al que veneramos como protector en la tierra. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
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Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.
Inmaculado Corazón de María, sed la salvación mía.
Ave María Purísima, sin pecado concebida.