martes, 17 de septiembre de 2024

PREDICE CRISTO SU MUERTE; REPRENDE A PEDRO QUE SE LA DISUADE. MIÉRCOLES DE LA DECIMOSÉPTIMA SEMANA DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

 


PREDICE CRISTO SU MUERTE; REPRENDE A PEDRO QUE SE LA DISUADE.

MIÉRCOLES DE LA DECIMOSÉPTIMA SEMANA

DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

 

MEDITACIONES

PARA EL TIEMPO  DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

DE LA OBRA “VIDA Y DOCTRINA DE JESUCRISTO

SACADA DE LOS CUATRO EVANGELISTAS

Y DISTRIBUIDA EN MATERIA DE MEDITACIÓN

PARA TODOS LOS DÍAS” DEL P. NICOLÁS AVANCINI

 

ORACIÓN PARA COMENZAR

TODOS LOS DÍAS:

 

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

 

Poniéndonos en la presencia de Dios, adoremos su majestad infinita, y digamos con humildad:

  

 “Omnipotente Dios y Señor y Padre mío amorosísimo, yo creo que por razón de tu inmensidad estás aquí presente en todo lugar, que estás aquí, dentro de mí, en medio de mi corazón, viendo los más ocultos pensamientos y afectos de mi alma, sin poder esconderme de tus divinos ojos.

    Te adoro con la más profunda humildad y reverencia, desde el abismo de mi miseria y de mi nada, y os pido perdón de todos mis pecados que detesto con toda mi alma, y os pido gracias para hacer con provecho esta meditación que ofrezco a vuestra mayor gloria… ¡Oh Padre eterno! Por Jesús, por María, por José y todos los santos enseñadme a orar para conocerme y conoceros, para amaros siempre y haceros siempre amar. Amén.”

 

Se meditan los tres puntos dispuestos para cada día.

 

MIÉRCOLES DE LA DECIMOSEPTIMA SEMANA

DESPUÉS DE PENTECOSTÉS.

PREDICE CRISTO SU MUERTE; REPRENDE A PEDRO QUE SE LA DISUADE.

 

1.- Empezó a enseñarles, que convenía que Cristo padeciese mucho, fuese reprobado de los ancianos, y muerto (1). ¿Por qué predice su muerte Luego después de la confesión de su Divinidad? Es a saber: 1. Porque no basta creer que Cristo es hijo de Dios; sino que es menester creer también, que padeció por nosotros. 2. Para que cuando llegase este tiempo no se escandalizasen los Discípulos; mas sabiendo: que era Dios, aprendiesen que no por flaqueza sino que por su voluntad moría. Imprime profundamente en tu corazón este misterio de amor. 3. Para enseñarte que has de salir luego al encuentro de tus alabanzas con algo que te humille.

2.- Y llegándose a Él Pedro, empezó a afeárselo, diciendo: No quieras tal cosa, Señor; no sucederá esto contigo (2). ¿Es por ventura ésta, audacia o temeridad, o nimio amor de Pedro? Cristo dice: Conviene. Pedro responde: No sucederá esto contigo; Porque no considera lo que tiene Dios decretado; que el que lo dice es aquel mismo a quien antes había confesado por Dios; sino que luego prorrumpe en lo que le dicta el humano afecto. Se ha de poner con la premeditación freno a la lengua. Si esto hubieras hecho siempre, no tuvieras que arrepentirte de lo que a veces hablaste.

3.- El cual, volviéndose a Pedro, le dice: Apártate de Mí, satanás; me sirves de escándalo. ¡Qué duro se le hacía a Cristo ser disuadido y que se le retardase la muerte que por ti tanto deseaba! ¡Qué prontamente a tan suaves razones sobrepone otras tan ásperas! ¡Qué poco aceptador de personas es el que al que hablando bien llamó bienaventurado, luego al hablar mal le reprende! con lo cual te da ejemplo, que no des oídos aun a los mas amigos cuando pretenden apartarte de lo bueno.

 

(1) Marc., 8. (2) Matth., 16.

 

ORACIÓN PARA FINALIZAR

TODOS LOS DÍAS:

Os doy gracias, Dios mío, por los buenos pensamientos, afectos y propósitos que me habéis inspirado en este rato de oración…

Todo os lo ofrezco a vuestra mayor honra y gloria… y os pido gracia eficaz para ponerlos por obra…

¡Oh Padre Eterno! Por Jesús, por María, por José y Teresa de Jesús dadme gracia ahora y siempre para cumplir en todas las cosas vuestra santísima voluntad. Amen."

 

Padrenuestro, Avemaría y Gloria

 

 

***

Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.

Inmaculado Corazón de María, sed la salvación mía.

Glorioso Patriarca san José, ruega por nosotros.

Santos Ángeles Custodios, rogad por nosotros.

Todos los santos y santas de Dios, rogad por nosotros.

 

***

¡Querido hermano, si te ha gustado esta meditación, compártela con tus familiares y amigos!

***

Ave María Purísima, sin pecado concebida.