martes, 7 de abril de 2015

EVANGELIO DEL DÍA: SOY YO, NO TEMÁIS


MARTES DE PASCUA
Forma Extraordinaria del Rito Romano
Mientras estaban hablando de estas cosas, se presentó Jesús en medio de ellos, y les dijo: La paz sea con vosotros: Soy yo, no temáis.  Ellos, atónitos, y atemorizados, se imaginaban ver a algún espíritu.  Y Jesús les dijo: ¿De qué os asustáis y por qué dais lugar en vuestro corazón a tales pensamientos?  Mirad mis manos y mis pies, yo mismo soy, palpad, y considerad que un espíritu no tiene carne, ni huesos, como vosotros veis que yo tengo.  Dicho esto, les mostró las manos y los pies.  Mas como ellos aún no lo acabasen de creer, estando como estaban fuera de sí de gozo y de admiración, les dijo: ¿Tenéis aquí algo de comer?  Ellos le presentaron un pedazo de pez asado y un panal de miel.  Comido que hubo delante de ellos, tomando las sobras se las dio.  Les dijo en seguida: Ved ahí lo que os decía, cuando estaba aún con vosotros, que era necesario que se cumpliese todo cuanto está escrito de mí en la ley de Moisés, y en los profetas, y en los salmos.  Entonces les abrió el entendimiento para que entendiesen las Escrituras.  Y les dijo: Así estaba ya escrito, y así era necesario que el Cristo padeciese, y que resucitase de entre los muertos al tercer día,  y que en nombre suyo se predicase la penitencia y el perdón de los pecados a todas las naciones.
Lucas 24,36-47