EL CAMINO
PARA AGRADAR A DIOS
Pues
sabemos el camino para agradar a Dios con la práctica de los mandamientos y
consejos evangélicos, andemos muy diligentes en esto y en meditar su vida y
muerte y lo mucho que le debemos; lo demás venga cuando el Señor quisiere (VI M
7, 9).