1 de octubre. San Remigio, obispo y confesor
Remigio, obispo de Reims, brilló por sus virtudes en tiempo de Clodoveo, rey de los Francos, a quien él mismo bautizó. Fue el primero que, con su predicación y sus milagros, convirtió a los Francos a la fe de Cristo, nuestro Señor; resucitó con sus oraciones a una niña. Comentó muchos libros de la Sagrada Escritura, y rigió en forma elogiable la Iglesia de Reims. Los milagros que siguieron a su muerte evidenciaron la santidad de la misma, y la de su vida.
Oremos.
Te pedimos, Dios todopoderoso, que al celebrar la fiesta de San Remigio, obispo, aumente nuestro celo por servirte, y crezca en nosotros tu obra de salvación. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, Dios, por todos los siglos de los siglos. R. Amén.