El Sr. Arzobispo de Toledo con su carta pastoral
“Conocer las escrituras: verdadero alimento y verdadera bebida”, nos invita a
durante este curso profundizar en el misterio de la Revelación de Dios a los
hombres y a conocer mejor la Sagrada Escritura haciendo “lectura espiritual”,
es decir, lectura orante en el Espíritu Santo que la ha inspirado y que sigue
presente en ella para hablarnos a nuestro hoy.
En nuestras meditaciones diarias, vamos a servirnos de
la Exhortación Apostólica Verbum Domini
que el Papa Benedicto XVI publicó como fruto de la XII Asamblea General
Ordinaria del Sínodo de los Obispos.
“La palabra del
Señor permanece para siempre. Y esa palabra es el Evangelio que os anunciamos»
(1 P 1,25): Esta nos pone frente al misterio de Dios que se comunica a sí mismo
mediante el don de su palabra. Esta palabra ha entrado en el tiempo. Dios ha
pronunciado su palabra eterna de un modo humano; su Verbo «se hizo carne»
(Jn1,14). Es necesario revalorizar la Palabra divina en la vida de la Iglesia,
fuente de constante renovación, para que sea el corazón de toda actividad
eclesial."
"«Os anunciamos
la vida eterna que estaba con el Padre y se nos manifestó. Eso que hemos visto
y oído os lo anunciamos para que estéis unidos con nosotros en esa unión que
tenemos con el Padre y con su Hijo Jesucristo» (1 Jn 1,2-3). El Apóstol
habla de oír, ver, tocar y contemplar (cf. 1,1) al Verbo de la Vida, porque la
vida misma se manifestó en Cristo. Y nosotros, llamados a la comunión con Dios
y entre nosotros, debemos ser anunciadores de este don."
"Exhorto a todos los fieles a reavivar el encuentro
personal y comunitario con Cristo, Verbo de la Vida que se ha hecho visible, y
a ser sus anunciadores para que el don de la vida divina, la comunión, se
extienda cada vez más por todo el mundo."
"En un mundo que considera con frecuencia a Dios como
algo superfluo o extraño, no hay prioridad más grande que esta: abrir de nuevo
al hombre de hoy el acceso a Dios, al Dios que habla y nos comunica su amor
para que tengamos vida abundante."
VERBUM DOMINI 1-2