sábado, 26 de noviembre de 2016

EL ROSARIO DE HOY CON EL BEATO ALBERIONE



 Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial: Se hace hoy memoria del beato Santiago Alberione, sacerdote italiano, que, solícito por la evangelización, se dedicó enteramente a poner al servicio de la sociedad humana los instrumentos de comunicación social para promover la verdad de Cristo, fundando, además, la Congregación de la Pía Sociedad de San Pablo Apóstol (1971).
Amante del rosario, decía: Cuando rezamos el Rosario repetimos cincuenta veces Ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte, María obtendrá a quienes practican fielmente la devoción del Rosario el desprendimiento de todo lo que es terrenal y la gracia de morir plenamente abandonados en Dios.
Señor mío Jesucristo…
MISTERIOS GOZOSOS
1.- La encarnación del Hijo de Dios en las entrañas purísimas de la Virgen María.
“Partir de María como el Maestro divino cuando comenzó la obra de la redención, es garantía de gracias especiales; Dios estableció a María como camino hacia Jesús y a Éste como camino hacia el Padre.”
2.-La Visitación de Nuestra Señora a su prima santa Isabel.
“Llevemos el mayor bien a todos. A todos debemos llevar el auxilio de nuestras oraciones, de nuestro consejo, de nuestra palabra, de nuestros libros, de nuestro ministerio, de nuestro ejemplo.”
3.-El nacimiento del Niño Dios en el portal de Belén
Nuestra vida comenzó en Jesucristo y, como Jesucristo, en el pesebre: Gloria a Dios en los cielos y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad. Puedo atestiguar que todo fue hecho sólo y siempre con la luz que viene de la eucaristía y en la obediencia; las aprobaciones de la Iglesia nos aseguran que las instituciones (paulinas) son buenas y pueden llevar a la santidad y que van de acuerdo a las necesidades de los tiempos.
4.-La purificación de Nuestra Señora y presentación del Niño Jesús en el templo
"A nosotros se dirige especialmente el mandato, la dulzura inefable y persuasiva de la invitación: «Sed perfectos». La santidad no es un privilegio o reserva. Nuestros jóvenes buenos no serán profesos, si no a condición de que lleguen a ser virtuosos.La santidad es virtud de alta tensión; es el empuje y la poesía del bien. El bien hecho flojamente, con cuen-tagotas, por fuerza... no es santidad. El santo no es un hombre agotado, una media con-ciencia incapaz de asumir la propia parte en la vida... Para san Pablo la santidad es la madurez plena del hombre, el hombre perfecto.  El santo no se enrolla, se desarrolla; no se para, sino que tiene por lema el “proficiebat”.  La santidad es vi-da, movimiento, nobleza,  efervescencia, de la buena, no algo que cae sino que sube. ¡Sí! Pero lo será, sólo y siempre, en proporción al espíritu de fe, y de nuestra voluntad: el Señor está con nosotros; somos cooperadores de Dios"
5.- El niño Jesús perdido y hallado en el templo
“Jesucristo es Maestro divino y el único Maestro; en primer lugar porque es la misma Verdad, la esencial y eterna verdad: «Yo soy la verdad» (Jn 14,6); es el Verbo que el Padre engendra eternamente. Luego, porque es Camino y Vida. En Cristo la persona humana tiene el máximo y sobrenatural desarrollo.”