jueves, 22 de enero de 2015

CONCEBIR A CRISTO COMO MARÍA. Beato Guillermo Jose Chaminade


Tu amor a María aumenta y bendigo a Dios por ello. Jesucristo mismo es quien te inspira ese amor. O, más bien, quien te infunde, poco a poco y en la medida de tu fidelidad, el mismo amor que él tiene a su Madre. En el momento de la encarnación, María fue asociada a la fecundidad eterna del Padre y engendró la humanidad de la que se revestía su Hijo. 
La fe nos permite también concebir a Jesucristo en nosotros mismos: Per fidem Christum habitare in cordibus vestris... Dedit eis potestatem filios Dei fieri. Todos los tesoros de la divinidad se reducen, en María, a la fe. La fe se convirtió en ella en plenitud de gracias, en fuente de vida. Como María concibió, por su fe, a Jesucristo en el orden natural, también nosotros podemos concebirlo realmente, por nuestra fe, en el orden espiritual. (1271 - 1 marzo 1843. Al P. Perrrodin).

¡Qué fácil es ver que el que se atiene a la letra se descarría enormemente en la hermosa familia de María! Siempre irresoluto, siempre inquieto, su corazón, roído por el hastío, va por todas partes, en alas de la duda, buscando, bajo el pretexto de lo más perfecto, la satisfacción de un secreto deseo de infidelidad a la Santísima Virgen. Su título, su condición de servidor de María no es nada a sus ojos. Su profesión no es lo bastante perfecta. Necesita algo más. ¡Como si hubiera algo más perfecto y más noble que entregarse al servicio de la Madre de Dios y abandonarse a su dirección maternal, como lo hizo el mismo Jesucristo! Por eso no quiere pertenecer a María de un modo especial, porque, según dice, sus pecados exigen una satisfacción más rigurosa, y termina por romper los dulces lazos que lo unían a la Reina de los ángeles y de los hombres. Ya no es hijo de María en su corazón y pronto o tarde perece. ¡Desdichado el hijo desnaturalizado que reniega de María y deserta de su familia! ¡Feliz, en cambio, mil veces feliz, el que es fiel! (1163 - 24 agosto 1839. A los predicadores de retiro de ese verano).