domingo, 12 de marzo de 2017

LA GLORIA DE LA CONVERSACION DE LOS BIENAVENTURADOS. San Francisco de Sales



Comentario al Evangelio

II DOMINGO DE CUARESMA
Forma Extraordinaria del Rito Romano

Quiere hablar San Francisco “solamente de cierta gloria accidental que reciben en las conversaciones que tienen”.
CONVERSACION DE LOS SANTOS ENTRE SI. “Todos los bienaventurados se conocerán los unos a los otros, cada uno por su nombre”… Lo mismo que sobre el Tabor, los tres apóstoles reconocen a Moisés y a Elías, a quien jamás habían visto. “Si es así, ¡oh Dios mío!, que contento sentiremos viendo a los que tanto hemos amado en esta vida. Conoceremos también a los nuevos cristianos que se convierten en las Indias, en el Japón y en los antípodas. Las amistades que fueron buenas durante esta vida continuaran eternamente en la otra. Amaremos a determinadas personas especialmente, pero estas amistades particulares no engendraran parcialidades, pues todos nuestros afectos tomaran su fuerza de la caridad de Dios, quien guiándonos a todos, hará que amemos a todos y cada uno de los bienaventurados con el mismo amor eterno con que seremos amados por la Divina Majestad”(ibid., p.312-313).
CONVERSACION CON LOS ANGELES. “Allí nuestros ángeles buenos nos proporcionaran una alegría mucho mayor de cuanto puede encomiarse cuando se nos den a conocer y nos presenten tan amorosamente el cuidado que han tenido de nuestra salvación durante el transcurso de esta vida mortal; nos harán conocer las santas inspiraciones que nos dictaban, como una leche sagrada que ellos iban a buscar para nosotros a los pechos de la divina Bondad, con que atraernos a cosas incomparables dulzuras de las que después habríamos de gozar”... (ibid.).
CONVERSACION PROPORCIONADA AL RANGO Y DIGNIDAD “Cada cual de los espíritus bienaventurados tendrá una conversación particular, según su rango y dignidad”.
CONVERSACION CON MARIA SANTISIMA. “¡Que gozo al entrar en el cielo, donde veremos el rostro bendito de Maria, resplandeciente de amor de Dios! Y si Santa Isabel quedo transportada de dicha y de contento cuando, en el día en que la visitó, oyole entonar el divino canto del Magníficat, ¡como vibrarán nuestros corazones y nuestro espíritu de increíble alegría cuando oigan entonar por esta sacratísima cantora el himno eterno de amor! ¡Oh que dulce melodía! Sin duda entraremos en éxtasis amoroso, que no entorpecerán las funciones de nuestras potencias, preparadas maravillosamente en el divino encuentro con la Santísima Virgen para mejor alabar y glorificar a Dios,  que tantas gracias otorgó y a nosotros también, dándonos la de conversar familiarmente con ella” (ibid., 315).
EL TEMA DE LA CONVERSACION: 1.) Hablaran de las misericordias que Dios les hizo en la tierra, por las cuales alcanzaron la felicidad que gozan. 2.) De la pasión y muerte de Jesucristo (como se hablaba de ese tema en el Tabor). “Ah, si pudiéramos comprender algo del consuelo de los bienaventurados al hablar de esta amorosa muerte, de qué manera nuestras almas se deleitarían pensando en ello!” (ibid.).
HABLAREMOS CON DIOS. 1.) Felicidad indecible e inenarrable cuando “a través de la llaga del sagrado costado de Jesucristo, veamos el corazón adorable de nuestro Maestro ardiendo del amor que nos tiene, corazón donde leeremos nuestros nombres escritos con letras de amor”. La consideración de los pensamientos de paz que animaban aquel corazón y el cuidado, que veremos, con que preparo cuanto concernía a nuestra salvación, “inflamara nuestros corazones de un placer y de un ardor incomparable”
2.) Felicidad al oír la conversación de las tres divinas personas en el seno de la Trinidad glorificándose mutuamente y también cuando nos dirige a nosotros la conversación. “Sera tal, que el hombre no puede decir; será algo tan secreto que nadie lo podrá oír, sino Dios y aquel con el cual Dios hable. El dirá palabras tan particulares a cada uno de los bienaventurados, que no abra otras semejantes…” (ibid., p.316-317).
San Francisco de Sales

Transcripto por Dña. Ana María Galvez