ANUNCIO DE LA PALABRA DE DIOS Y LOS EMIGRANTES
Reflexión diaria acerca de la Palabra de
Dios.
La Palabra de Dios nos hace estar atentos a la historia y a todo lo nuevo
que brota en ella, como el complejo fenómeno de la emigración.
Se plantean cuestiones sumamente delicadas sobre la seguridad de las
naciones y la acogida que se ha de ofrecer a los que buscan refugio,
mejores condiciones de vida, salud y trabajo. Gran número de personas, que no
conocen a Cristo o tienen una imagen suya inadecuada, se establecen en países
de tradición cristiana. Al mismo tiempo, otras procedentes de pueblos profundamente
marcados por la fe cristiana emigran a países donde se necesita llevar el
anuncio de Cristo y de una nueva evangelización.
Estas
situaciones ofrecen nuevas posibilidades para la difusión de la Palabra de
Dios: Los emigrantes tienen el derecho de escuchar el kerigma, que se
les ha de proponer, pero nunca imponer. Si son cristianos, necesitan una
asistencia pastoral adecuada para reforzar su fe y para que ellos mismos sean
portadores del anuncio evangélico. Cfr. Verbum Domini,
105