Santo Rosario.
Por la señal...
Monición inicial: Tal día como hoy del
año 1994 entrega su alma a Dios en la ciudad de
Roma, el beato Álvaro del Portillo y Diez de Sollano, español, obispo y prelado
de la Prelatura Personal de la Santa Cruz y del Opus Dei.
Señor mío Jesucristo...
MISTERIOS LUMINOSOS
1.-El Bautismo del Señor en el Jordán
“El
conocimiento de que somos hijos muy queridos de Dios nos moverá poderosamente.
Y como dote inseparable de este don preciosísimo, viene al alma el gaudium cum
pace, la alegría y la paz.”
2.-El Milagro de las Bodas de Cana
“Vamos
a alejar de nuestro horizonte cotidiano cualquier preocupación personal; y si
nos asalta alguna, la abandonaremos con plena confianza en el Sagrado Corazón
de Jesús, en el Corazón Dulcísimo de María, nuestra Madre, y nos quedaremos
tranquilos.”
3.- El anuncio del Reino invitando a la conversión.
“No
olvidéis que la alegría es consecuencia de la paz interior, y que la verdadera
paz es inseparable de la compunción, del dolor humilde y sincero por nuestras
faltas y pecados que Dios perdona en el Santo Sacramento de la Penitencia.”
4.-La Transfiguración del Señor
““La
humildad se manifiesta en el convencimiento profundo y sincero de que no somos
mejores que los demás y, al mismo tiempo, en la certeza firme de que hemos sido
convocados específicamente por Dios para servirle en medio de las distintas
situaciones de cada momento y traerle muchas almas. Esta seguridad nos llena de
optimismo.”.”
5.- La institución de la Eucaristía
“Crecer
en vida interior es una exigencia de nuestra vocación divina. Crecer significa
renovarse, abandonar lo que se ha hecho viejo —con la vejez del
acostumbramiento, de la rutina, de la tibieza— y reencontrar la juventud de
espíritu, que únicamente brota de un corazón enamorado.”