Santo Rosario.
Por la señal...
Monición
inicial: Se hace hoy memoria de San José Manyanet y Vives
(Pare Manyanet), presbítero, que fundó las Congregaciones de Hijos e Hijas de
la Sagrada Familia, para que, a ejemplo de la santa Familia de Nazaret, Jesús,
María y José, todas las familias se orientaran hacia la perfección.
Señor
mío Jesucristo…
MISTERIOS LUMINOSOS
1.-El Bautismo del Señor en el Jordán
“Para
que nuestros ejercicios espirituales tengan todo el valor y el mérito delante
de Jesucristo, es preciso que unamos nuestros sentimientos a los de la vocación
y afecto que animaban al mismo en las
oraciones que dirigía a su divino Padre.”
2.-El Milagro de las Bodas de Cana
“Toda
obra sin caridad ni es agradable a Dios ni nos aprovecha nada para la vida
eterna. La caridad con todos tiene corazón de padre, de todos se compadece y a
todos trata con afecto, benevolencia y maneras cariñosas a la par que
persuasivas, e inclinada mejor a recompensar que no a castigar..”
3.- El anuncio del Reino invitando a la conversión.
““Sed
perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto” “Conformar, pues, nuestra
conducta con la conducta de Jesús es lo que se nos manda (…) Para que uno pueda
formarse juicio de si ama de veras a Jesús, debe ver reproducidas en su persona
las hermosas virtudes que resplandecen en el acabado modelo, o sea, la humildad
profunda, la modestia, el recato y circunspección admirables;
aquella igualdad de ánimo así en las honras como en los desprecios sin
perder jamás la completa posesión de sí mismo… grabada en su cuerpo la imagen
de Jesús crucificado!. Debe dedicarse
con celo y constancia a promover los
intereses de Dios y procurar con todas
sus fuerzas la salvación de las almas.”
4.-La Transfiguración del Señor
“Anímate,
alma mía, y reconociendo tu estado y dignidad, seas del todo agradecida a los
singulares beneficios que el Señor te ha dispensado: no consientas que por
apatía o culpable descuido se malogren en ti los designios de Dios. Sigue e
imita a Jesús, para que tu amor y unión con Él sea el feliz término de tu vocación.”
5.- La institución de la Eucaristía
“Debemos
mostrarnos agradecidos y fieles a las gracias del Señor (…) Contentos de la
propia vocación y de los beneficios recibidos… mostrando la gratitud mediante
el cumplimiento de todos los deberes propios del estado religioso, según la
voluntad de Dios… procurando corresponder en lo posible y con todas las fuerzas
a las inspiraciones y toques interiores de la gracia…, haciendo fructificar los
talentos que se nos han dado.”