VOS, BIEN MÍO, QUERÉIS
MIRAR CON AMOR
Considero yo muchas veces, mío,
cuán sabrosos y cuán deleitosos se muestran vuestros ojos a quien os ama, y
Vos, Bien mío, queréis mirar con amor. Me parece que sola una mirada tan suave
a las almas que tenéis por vuestras, basta como premio de muchos años de
servicio (E 14).