Santo Rosario.
Por la señal...
Monición
inicial: Se hace hoy memoria de la beata Elena Aiello, religiosa y fundadora de la
Congregación de Religiosas Mínimas de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo
para socorro espiritual y material de los pobres, especialmente de la infancia
necesitada. Fue marcada con los estigmas del Señor, y al fenómeno de sudar
sangre se unía el dolor, la privación de los sentidos y el don de profecía. (†
1961).
Con algunos de
sus mensajes, meditamos el rosario de hoy.
Señor mío
Jesucristo...
MISTERIOS DOLOROSOS
1. La Oración
de Jesús en el Huerto
“Se
necesita oración y penitencia de mís almas fieles para aplacar la Justicia
Divina, para atemperar la justa sentencia del castigo, que ha sido suspendida
en la Tierra POR LA INTERCESIÓN DE MI AMADA MADRE, que es también Madre de todo
el linaje humano. Oh, que triste está mí Corazón al ver que LOS HOMBRES NO
RESPONDEN a los muchos lamamientos de mí amor y de dolor, dirigidos por mí
Amada Madre a la humanidad errante. Errado en la oscuridad siguen viviendo en
sus pecados y se alejan más de Dios; pero el CASTIGO DE FUEGO se acerca para
purificar la Tierra de las iniquidades de los perversos.”
2. La flagelación
de Jesús atado a la columna.
“Jesús
se me apareció cubierto de llagas y de sangre y me dijo: Mira, hija mía, como
los pecados del mundo me han herido. El mundo se ha sumergido enteramente enla
suciedad y desborda corrupción. Los Gobiernos de los pueblos se han levantado
como demonios encarnados.”
3. La
coronación de espinas
“Los
hombres ABUSAN DE MI MISERICORDIA y han transformado la Tierra en una escena de
crimenes. Muchos escándalos llevan a las almas a la perdición... Especialmente
por la corrupción de la juventud. El rezo está casi muerto en los labios de
muchos. La voluntad de los hombres ya no cambia. Viven en la obstinación del
pecado.”
4. Nuestro
Señor con la cruz a cuestas camino del Calvario
“¡Qué
de estragos hace en medio de la juventud y de los niños el pecado de la
impureza! La familia cristiana ha dejado de existir.—Ello ya no constituye un
misterio; quieren expulsar a Cristo de las familias, de las escuelas, de las
oficinas, de la sociedad, de las conciencias. Rogad intensamente...”
5. La
crucifixión y muerte del Señor
“La
Justicia de Dios exige reparación por las muchas ofensas y crimenes que cubren
la Tierra y que ya no se pueden comprometer más. Anuncia a la humanidad que
deben volver a Dios, haciendo penitencia y haciéndolo así tienen esperanza de
ser perdonados y salvados de la justa venganza de un Dios despreciado.”