MES
DE JUNIO AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS CON SANTA TERESA
14
de junio
ORACIÓN DE OFRECIMIENTO
En el V centenario del nacimiento de Santa
Teresa de Jesús, contemplemos el Corazón de Cristo, su amor constante hacia
nosotros, y ofrezcámosle nuestro corazón con vivos deseos de hacer su voluntad.
Con las mismas palabras de la Santa decimos:
Vuestra
soy, para Vos nací, ¿qué mandáis hacer de mí?
Vuestra
soy, pues me criasteis, vuestra, pues me redimisteis,
vuestra,
pues que me sufristeis, vuestra pues que me llamasteis,
vuestra
porque me esperasteis, vuestra, pues no me perdí:
¿qué mandáis hacer de mí?
Veis
aquí mi corazón, yo le pongo en vuestra palma,
mi
cuerpo, mi vida y alma, mis entrañas y
afición;
dulce
Esposo y redención, pues por vuestra me
ofrecí. Amén.
MEDITACIÓN
PARA
VOS NACÍ, ¿QUÉ MANDÁIS HACER DE MÍ?
El
Señor nos manda: No consentirás pensamientos ni deseos impuros
El noveno mandamiento nos exige vencer
la concupiscencia en los pensamientos y en los deseos. Mediante la continua
purificación del corazón y la gracia de Dios, el hombre está llamado a luchar
contra los deseos desordenados.
Estamos llamados a buscar la pureza del
corazón, la pureza de la mirada exterior e interior, la pureza en nuestras
intenciones, dominando nuestros sentimientos e imaginación. Para ello, hemos de
utilizar dos medios indispensables: la oración y la mortificación.
Además, la vivencia de la pureza exige
el pudor y la modestia que nos protegen contra del sensualismo actual y de la curiosidad
morbosa.
Pidamos la gracia de vivir y manifestar
en nuestras palabras, gestos y formas de vestir.
Hagamos un acto de reparación por todos
los pecados contra la pureza y la castidad, particularmente por todos aquellos
que lo promueven o consienten.