Santo Rosario.
Por la
señal...
Monición inicial: Se hace hoy memoria de san Carlos
Borromeo, obispo, que nombrado cardenal por su tío materno, el papa Pío IV, y
elegido obispo de Milán, fue en esta sede un verdadero pastor fiel, preocupado
por las necesidades de la Iglesia de su tiempo, y para la formación del clero
convocó sínodos y erigió seminarios, visitó muchas veces toda su diócesis con
el fin de fomentar las costumbres cristianas y dio muchas normas para bien de
los fieles. Pasó a la patria celeste en la fecha de ayer (1584)
Entre
esos consejos decía: “elige al a gloriosa
Virgen María por tu protectora, a la cual recurrirás con especialidad en todas
tus necesidades.”
Señor mío Jesucristo…
MISTERIOS DOLOROSOS
1. La Oración de Jesús en el Huerto
“Lo que principalmente se debe
atender, y procurar, es la gracia de Dios, sin la cual no se puede vivir
cristianamente. A esto ayudará tener el santo temor de Dios, que es el principio
de nuestra salud, y de todo bien, guardándose de hacer cosa, que ofenda sus
purísimos ojos.”
2. La flagelación de Jesús atado a la
columna.
“Guárdate de murmurar, injuriar y de
quitar la fama a ninguno. Jamás cuentes cosa de alguno que le pueda turbar su
paz y quietud; y guárdate de sembrar discordias. Guárdate de las palabras
disolutas, aún de las ociosas.”
3. La coronación de espinas
“Procura con la Divina gracia refrenar
la ira en las cosas que cada día sucedan en tu casa o fuera; y no comiences al
punto a alborotarte, y dar gritos para que no se sigan mayores inconvenientes. Acuérdate
de sufrir los defectos de otros, ya sean de los domésticos, o extraños, como tú
quisieras que otros sufrieran los tuyos.
4. Nuestro Señor con la cruz a cuestas
camino del Calvario
“Acuérdate que eres Cristiano, y que
por lo mismo has de sufrir con paciencia por amor de Cristo las injurias que te
hicieren, perdonarlas, volver bien por mal, y rogar por tus enemigos.”
5. La crucifixión y muerte del Señor
“Espera el premio de todas tus fatigas
de Cristo, y no del mundo.”