LA SAGRADA ESCRITURA Y EL
LECCIONARIO
Reflexión diaria acerca de la Palabra de Dios.
Es necesario
subrayar la importancia de la Palabra
de Dios que es proclamada a lo largo del año litúrgico donde, además, de
presentar frecuentemente los textos más importantes de la Escritura, favorece
la comprensión de la unidad del plan divino, mediante la correlación entre las
lecturas del Antiguo y del Nuevo Testamento, «centrada en Cristo y en su
misterio pascual».
Las lecturas propuestas por el Leccionario han de
proclamarse en la asamblea litúrgica en su totalidad, como está previsto en la
liturgia del día.