Santo Rosario.
Por la señal...
Monición
inicial: Meditamos el rosario de hoy con San Hilario, obispo y doctor de la
Iglesia, que fue elevado a la sede de Poitiers, en Aquitania (hoy Francia), en
tiempo del emperador Constancio, quien había abrazado la herejía arriana. Este
santo luchó denodadamente en favor de la fe nicena acerca de la Trinidad y de
la divinidad de Cristo, siendo desterrado, por esta razón, durante cuatro años
a Frigia. Compuso unos comentarios muy célebres sobre los Salmos y sobre el
evangelio de san Mateo. Entregó su alma a Dios en el año 367.
Señor
mío Jesucristo…
MISTERIOS DOLOROSOS
1 MISTERIO – LA ORACIÓN EN EL HUERTO
“Yo pregunto (..) si es razonable que pudiera temer
la muerte aquél que, quitando a los apóstoles todo temor de la muerte, les
exhortó a la gloria del martirio. Porque, ¿qué pudo temer en la muerte quien
devuelve la vida a los que mueren por El? Además, ¿qué dolor de muerte podía
temer el que iba a morir por su propia voluntad? Si aun la pasión había de
honrarle, ¿cómo había de entristecerle el temor de ella?”
2 MISTERIO – LA FLAGELACIÓN
“El Señor, después de haber tomado sobre sí todas
las enfermedades de nuestro cuerpo, nos demuestra con el color de la púrpura la
sangre derramada por los mártires que habían de merecer con El el reino de los
cielos.”
3 MISTERIO – LA CORONACIÓN DE
ESPINAS
“También es coronado de espinas, esto es, de los
pecados de las naciones que como aguijones forman la corona de la victoria de
Cristo. Con la caña que empuña su mano, conforta la debilidad y la frivolidad
de las naciones, y es golpeada con ella su cabeza, para que la debilidad de los
gentiles, sostenida por la mano de Jesucristo, descanse también en Dios Padre
(que es su cabeza).”
4 MISTERIO – EL CAMINO AL CALVARIO
“Los judíos eran indignos de llevar la cruz de
Jesucristo, porque había quedado como patrimonio de la fe de los gentiles el
recibir y compartir la cruz del redentor.
Debemos, pues, seguir al Señor, tomando la cruz de
su pasión si no en la realidad, al menos con la voluntad. Aquellos que han
crucificado su cuerpo y con él sus vicios y sus concupiscencias, son de Cristo
( Gál 5) y es indigno de Cristo el que no sigue al Señor después de haber
tomado su cruz, por la que nosotros sufrimos con El, morimos, somos enterrados
y resucitados, para vivir con espíritu nuevo en este misterio de la fe.”
5 MISTERIO – LA CRUCIFIXIÓN.
“Son
crucificados dos ladrones, uno a la derecha y otro a la izquierda, para
manifestar que todos los hombres eran llamados a participar de los beneficios
de la pasión del Señor. Y como hay diferencia de fieles e infieles, así se
estableció la división de aquéllos entre la derecha y la izquierda, colocándose
uno de los dos a la derecha, el cual se salvó por su profesión de fe.”