TOMAR
CONCIENCIA
¿Quién puede decir que es malo que cuando comenzamos a rezar la
Liturgia de las
Horas o el rosario, se piense con quién vamos a hablar y quiénes somos los que
hablamos, para acertar en el modo de tratar a Dios o a la
Virgen o a los
santos? Pues si hiciéramos bien lo que hay que hacer, que es tomar conciencia
de estos dos datos, dedicarías mucho tiempo a la oración mental, antes de
comenzar a rezar la oración vocal (C 22, 3).