QUE APAREZCA DELANTE DE VOS CON VESTIDURAS DE BODAS
¿Y por
qué hay que maravillarse de lo que hace el Todopoderoso? Bien sabéis Vos, mi
Dios, que entre todas mis miserias nunca dejé de conocer vuestro gran poder y
misericordia. Válgame, Señor, esto en que no os he ofendido. Recuperad, Dios
mío, el tiempo perdido, con darme gracia en el presente y porvenir, para que
aparezca delante de Vos con vestiduras de bodas, pues, si queréis, podéis (E
4).