NO PODEMOS
COMPRENDER SUS GRANDEZAS
No hemos de buscar razones para comprender las cosas ocultas de Dios, sino
que como creemos que es poderoso, está claro que hemos de creer que un gusano
de tan limitado poder como nosotros no puede comprender sus grandezas.
Alabémosle mucho porque quiere que comprendamos algunas (VI M 4, 7).