NOVENA
AL SANTO PADRE PIO DE PIETRELCINA
DÍA OCTAVO. Purísimo Padre Pío de
Pietrelcina, tu amor a tus hijos espirituales y a todos aquellos que nos
acogemos bajo tu paternal cuidado, te llevó a pedirle a Dios: “Señor, no me dejéis ir al Paraíso hasta que
el ultimo de mis hijos; la última de las personas que me han sido confiadas,
haya entrado antes que Yo.” Te rogamos que seas para nosotros y cuántos
te veneramos un verdadero maestro de nuestras almas y que seas nuestro abogado
ante la justicia de Dios en la hora de nuestra muerte. Amén.
Se
termina con la Novena al Sagrado Corazón de Jesús.