domingo, 9 de octubre de 2022

9 de octubre. San Juan Leonardi, confesor

 

9 de octubre. San Juan Leonardi, confesor

Juan Leonardi nació de padres piadosos y respetables en la ciudad de Diecimo, cerca de Lucca. Desde la infancia se mostró maduro, con inclinación a la soledad y la oración. Cuando tenía 26 años Dios lo llamó a alistarse en la milicia de la iglesia, renunciando de inmediato a todos sus intereses mundanos. Tuvo que estudiar latín elemental con los niños pequeños, pero avanzó rápido en el conocimiento de la literatura, la filosofía y la teología. Después de unos cuatro años, por obediencia, fue ordenado sacerdote. Poco después se juntó con unos jóvenes llenos de celo por alcanzar la perfección en la virtud. Al año siguiente se formó la Congregación de Clérigos Regulares de la Madre de Dios; nombre elegido debido a su intensa devoción a la Santísima Virgen María. Trabajaron con tanto celo en el cuidado de las almas, que en breve se produjo un cambio benéfico en Lucca, donde los engaños pérfidos de los herejes habían suscitado odios corrompiendo la moral, y la piedad primitiva del cristiano pareció revivir.

Debido a los trabajos tan saludables, Juan soportó feroces persecuciones de hombres malvados que trataron de destruir a la familia recién establecida. Pero el hombre de Dios, llevando todas las cosas alegre y serenamente, defendió pertinazmente el fruto de sus trabajos apostólicos, aprobando el Papa Gregorio XIII su Congregación. Muchos obispos a punto de emprender empresas difíciles buscaron su consejo y ayuda. Incluso el Papa le delegó la solución de un litigio complejo y la reforma de las sociedades religiosas. Apoyó a San José de Calasanz cuando su congregación estaba al borde del colapso. Las horas que Juan dedicó a los asuntos del Hospital del Espíritu Santo y las del convento de Santa Francisca Romana fueron arduas, y no fueron pocas.

Dolorido porque a muchas partes no había llegado aún la luz de la fe, estaba inflamado de deseos de difundir la verdadedera religión entre los infieles. Pero cuando San Felipe Neri, que llamó a Juan un verdadero reformador, le mostró que él y su Congregación estaban destinados a educar al pueblo italiano, Juan accedió a la voluntad de Dios. Sin embargo, no descuido ayudar a los infieles a conocer la luz verdadera, en caso de que pudiera hacer algo. Por lo que hizo un plan, con el piadoso prelado Vives, de preparar bien y formar un grupo de sacerdotes para enviarlos a regiones remotas a propagar la fe. Por lo tanto, y con justa razón, es considerado como fundador de ese instituto tan ilustre de los soberanos pontífices que sirve para difundir la fe católica en el mundo. Juan escribió muchos trabajos sobre teología y moralidad, bien adaptados a los hombres de su tiempo. Finalmente, revestido de cilicio y cubierto de cenizas, sin fallar nunca a su sagrado ministerio, voló al Señor en Roma el nueve de octubre de mil seinciento nueve, a la edad de sesenta y seis años. Famoso por su santidad y los milagros que realizó, Pío IX lo incluyó entre los bianventurados. En 1938, en la fiesta solemne de Pascua, Pío XI lo inscribió entre los Santos.

 

Oremos.

Oh Dios, que suscitaste a San Juan Leonardi para propagar la fe entre las naciones paganas; y por medio de él, fundaste en tu Iglesia una nueva congragación para instruir a los fieles: concédenos sacar provecho de sus enseñanzas, para alcanzar la recompensa eterna. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, Dios, por todos los siglos de los siglos. R. Amén.

  

HIMNO A LA CRUZ. San Juan Leonardi

MISTERIOS LUMINOSOS DEL ROSARIO DE HOY CON SAN JUAN LEONARDI