11 de julio. San Pío I, Papa y mártir.
Pío I, hijo de Rufino, nació en Aquilea. Siendo Cardenal Presbítero de la Iglesia Romana, fue elegido Papa, bajo el reinado de Antonino Pío y Marco Aurelio. En 5 ordenaciones efectuadas en el mes de diciembre, consagró 12 Obispos y ordenó 18 Presbíteros. Han llegado hasta nosotros varios decretos suyos importantes, entre ellos el que establecía que la Resurrección del Señor sólo se celebrase en domingo. Transformó en iglesia la casa de Pudente, y por su preeminencia sobre los demás títulos, por ser residencia del Papa, la dedicó bajo el título del Pastor. Celebró en ella con frecuencia los sagrados Misterios y bautizó también allí a muchos convertidos a la fe. Estando desempeñando su oficio de buen pastor, derramó la sangre por sus ovejas y por Jesucristo, Pastor supremo. Recibió la corona del martirio el once de julio y fue sepultado en el Vaticano.
Oremos.
Pastor eterno, que cuidas de tu rebaño con amor: guárdalo con tu protección perpetua, por intercesión de San Pío, mártir tuyo y sumo pontífice, a quien hiciste pastor de toda la Iglesia. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, Dios, por todos los siglos de los siglos. R. Amén.
