COMENTARIO AL EVANGELIO
FIESTA DE CRISTO REY
San Jerónimo
Nadie duda de que antes de que fueramos adoptados por Dios, nuestro padre era el diablo, de quien dice el Salvador: Vosotros habéis nacido del diablo, que es vuestro padre.
Así, pues, cuando hayas olvidado a tu antiguo padre, y limpia de tus impurezas pasadas te muestres tan blanca que puedas subir apoyada en tu bienamado y merezcas ser amada de mi Hijo, entonces el rey quedará prendado de tu belleza. Y no pienses que sea uno de tantos aquel de quien vas a ser amada: es tu rey y a la vez tu señor. (...) Te hago saber que Él es tambien Dios tuyo y a Él tienes que adorar. (...) El que te va a amar , el que codiciará tu hermosura, es Dios y ha de ser adorado por los hombres. Lo que expusimos acerca de la Iglesia congregada de entre las naciones, cada uno ha de aplicarselo a sí mismo, y al alma del creyente para que, después de abandonados sus vicios pasados, sea adoptada por hija, incline su oído, olvide su anterior conducta, deje con el apostol al padre muerto, y se muestra tal que merezca ser amada por el Rey. Pues Él es su señor, ante quien debe doblar la rodilla y aceptar el yugo de la humildad abandonando su soberbia.