martes, 3 de octubre de 2017

EL ROSARIO DE HOY CON SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS





Santo Rosario.
Por la señal... 
Monición inicial:  Se hace hoy memoria de de santa Teresa del Niño Jesús, virgen y doctora de la Iglesia, que entró aún muy joven en el monasterio de las Carmelitas Descalzas de Lisieux, llegando a ser maestra de santidad en Cristo por su inocencia y simplicidad. Enseñó el camino de la perfección cristiana por medio de la infancia espiritual, demostrando una mística solicitud en bien de las almas y del incremento de la Iglesia, y voló al cielo a los 25 años de edad, el día 30 de septiembre del año 1897.
Ella nos dice: “La Santísima Virgen me demuestra que nunca deja de protegerme. Enseguida que la invoco, tanto si me sobreviene una inquietud cualquiera, un apuro, inmediatamente recurro a ella, y siempre se hace cargo de mis intereses como la más tierna de las Madres."
Con esa misma confianza acudimos a Nuestra Señora en el rezo del santo rosario.
Señor mío Jesucristo... 
MISTERIOS DOLOROSOS
1. La Oración de Jesús en el Huerto
“Para mí, la oración es un impulso del corazón, una simple mirada dirigida al cielo, un grito de agradecimiento y de amor, tanto en medio del sufrimiento como en medio de la alegría. En una palabra es algo grande, algo sobrenatural que me dilata el alma y me une a JESÚS.”
2. La flagelación de Jesús atado a la columna.
“Me fue dado también un gran amor a la mortificación. Y este amor era tanto más grande, cuanto menos era lo que me permitían hacer para satisfacerlo… De haber obtenido permiso para hacer muchas penitencias, de seguro que mi ardor no hubiera durado gran cosa. Las solas que me concedían, sin yo pedirlas, era mortificar mi amor propio, lo cual me aprovechaba mucho más que las penitencias corporales».”
3. La coronación de espinas
“¿Cómo es posible que Dios, amándonos infinitamente, se goce en hacernos sufrir?  No; Dios no puede gozarse en nuestro dolor, pero éste nos es necesario. Lo permite, pues, como a pesar suyo.”
4. Nuestro Señor con la cruz a cuestas camino del Calvario
“Mi caminito es el camino de una infancia espiritual, el camino de la confianza y de la entrega absoluta.”
5. La crucifixión y muerte del Señor
“Te doy gracias, Dios mío, por todos los beneficios que me has concedido, y en especial por haberme hecho pasar por el crisol del sufrimiento. En el último día te contemplaré llena de gozo llevando el cetro de la Cruz. Ya que te has dignado darme como lote esta cruz tan preciosa, espero parecerme a ti en el cielo y ver brillar en mi cuerpo glorificados los sagrados estigmas de tu Pasión... Después del destierro de la tierra, espero ir a gozar de ti en la Patria, pero no quiero acumular méritos para el cielo,, quiero trabajar sólo por tu amor, con el único fin de agradarte, de consolar a tu Sagrado Corazón y de salvar almas que te amen eternamente.