Prudentísimo
Padre San Pío de Pietrelcina. Tú que tanto amas y nos enseñaste a amar a las
Almas del Purgatorio; por las que te has ofrecido como víctima que expió sus
penas. Ruega a Dios Nuestro Señor, para que ponga en nuestros corazones
sentimientos de compasión y amor por estas almas. También nosotros ayudaremos a
las Almas del Purgatorio y reduciremos sus tiempos de destierro y de gran
aflicción. Ganaremos para Ellas, con sacrificios y oración, el descanso eterno
de sus almas; y las santas Indulgencias necesarias para sacarlas del lugar del
sufrimiento.
PENSAMIENTO DEL P. PÍO.
"Oh Señor, Padre
Jesucristo; te suplico viertas sobre mí, todos los castigos que son para los
pecadores y las ánimas benditas del purgatorio; multiplica sobre mí los
sufrimientos, conque conviertes y salvas a los pecadores, y líbralos pronto del
tormento del purgatorio."